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TERESA DE JOSEFINA

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A Josefina Molina, la Academia de Cine le ha concedido el Goya de Honor. Pero la Academia de Televisión también debería premiar a quien fue la primera mujer que obtuvo el título de directora/realizadora en la Escuela Oficial de Cinematografía. Aunque solo fuera por 'Teresa de Jesús'. Ahora que las series de época tienen tanto predicamento, recordar que hubo un tiempo en que a TVE, la única de entonces, ya le salían muy bien. De hecho, las dos grandes referencias siguen siendo 'Los gozos y las sombras' y 'Teresa de Jesús'. Miniseries, es cierto. Cine por capítulos, puede ser. Pero televisión en todo caso.

'Teresa de Jesús' (1984) reúne en su escritura a Carmen Martín Gaite, Víctor de la Concha y la propia Molina. En la interpretación, a una grandísima Concha Velasco pero también a la desaparecida María Massip. Y a Marina Saura, a Manuel de Blas, a Miguel Rellán, a Chus Lampreave y hasta a Gracita Morales. No es 'Teresa de Jesús' una serie histórica cualquiera. Es, además, un retazo de la vida privada de las mujeres, monjas o no. Un toque de 'Entre visillos', que para eso estaba Martín Gaite. La producción tiene una carga de cotidianeidad perfectamente integrada con el retrato de la enorme figura religiosa y literaria de la santa de Ávila. Hay una escena (confío en mi memoria) en que Teresa y Juana (María Massip) están sentadas en un porche y se produce un diálogo intrascendente. «Teresa», empieza Juana. «¿Qué?», dice la otra. «Cuéntame algo», termina Juana. Y eso que eran ocho capítulos. Como para perder el tiempo con escenas en las que no pasara nada. Pero ese nada aportaba a la serie tanto como las visiones internas o la fundación de conventos. Mención aparte merece Concha Velasco, tan desaprovechada en 'Gran Hotel'. La actriz vallisoletana se exhibió con una interpretación que mezclaba a la pizpireta chica de la Cruz Roja (o a la chica de Fortuna, provincia de Murcia, de 'Historias de la televisión') con la intensidad de la Santa. Los ocho capítulos costaron 200 millones de pesetas. Uno solo de 'Águila Roja' ronda el millón de euros.