ESPAÑA

Rubalcaba rechaza bajar los sueldos para ser competitivos

El candidato socialista promete que si gana el 20-N habrá créditos del Estado a los emprendedores

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Ni se compromete a acabar con el desempleo en la próxima legislatura, una tarea que ha llegado a tachar de «imposible», ni se ve capaz de decir cuántos puestos de trabajo se crearían si la administración invierte los 2.500 millones de euros que, según asegura, podrían recaudarse con su propuesta de recuperar el impuesto de patrimonio para grandes fortunas y una futura tasa a la banca. Alfredo Pérez Rubalcaba anda con pies de plomo para no pillarse los dedos con sus promesas electorales y, sin embargo, ayer dio un osado paso al frente. «Hay una opción vedada para siempre: no vamos a bajar salarios porque esa no es la forma de ser más competitivos», dijo.

La declaración de principios, lanzada en un foro sobre educación para el empleo organizado por el PSOE en la sede del partido, en la calle Ferraz, responde sin duda al mensaje que lanzó el ex vicepresidente económico del PP, Rodrigo Rato, la jornada anterior en Canarias. El hoy presidente de Bankia se mostró partidario de vincular salarios a productividad, como por otro lado reclaman la canciller alemana Angela Merkel o el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, y defendió que es necesario acometer una reforma del sistema de negociación colectiva para que los ajustes del mercado laboral repercutan más en el coste de cada trabajador que en el número de empleados, es decir, para evitar que el paro se dispare.

Rubalcaba replicó que la bajada de sueldos no es «socialmente aceptable» y aseguró que él no la respaldará «jamás». El contundente comentario fue pronunciado frente a un nutrido grupo de militantes y simpatizantes involucrados en el mundo de la educación y entre los que no faltaban empleados públicos, un sector que ya vio recortado sus salarios en un 5% en mayo de 2010 por decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

Libre de las ataduras del Ejecutivo desde hace dos meses, el candidato socialista argumentó esta vez que para ser capaz de competir lo que necesita España es «hacer las cosas mejor» y que la fórmula para lograrlo reside en la innovación, la formación y la educación.

Aún queda más de un mes para que los socialistas presenten su programa electoral y cuesta arrancar al dirigente socialista mayor grado de concreción. Hasta ahora, lo que ha avanzado es que para combatir el desempleo optará por un proyecto 'keynesiano', lo que se traduce en inyecciones de dinero público.

Financiación directa

A su promesa de crear una ley estatal para acabar con las diferencias existentes entre autonomías y facilitar la creación de empresas, añadió ayer otra nueva: el Estado facilitará a los emprendedores los créditos que las entidades financieras son incapaces de conceder en estos momentos para que puedan llevar a cabo sus proyectos.

Rubalcaba dio a la propuesta un carácter transitorio, en tanto no mejore la situación del propio sector bancario. Lo que no aclaró es de dónde sacará la Administración ese dinero en un momento en que España debe hacer frente a sus compromisos de drástica reducción del déficit.

El pasado martes, durante la presentación del borrador del texto que el grueso del PSOE discutirá en la Conferencia Política prevista para el 30 de este mes y el 1 y 2 de octubre, aseguró que los recursos que el Estado dedique a financiar el empleo vendrán, ante todo, del impuesto que impondrá a los bancos cuando se acabe el proceso de reestructuración. Una pescadilla que se muerde la cola.