Alvárez-Cascos y Aguirre charlan en un acto del PP en Alcalá de Henares en 2007. :: R. C.
ESPAÑA

Rajoy aborta la polémica tras el apoyo de Aguirre a Cascos«No voy vender la piel del oso antes de matarlo»

La presidenta de Madrid aseguró por la mañana que no apoyaría a Pérez-Espinosa y por la tarde matizó que ayudará a la candidata

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Si la unidad del PP fuera un valor que cotizara en Bolsa, Esperanza Aguirre habría provocado ayer pérdidas millonarias. La presidenta de la Comunidad de Madrid empañó en menos de 24 horas la imagen de confraternización que mostraron los populares en la convención nacional celebrada este fin de semana en Sevilla al declarar que no apoyará a la candidata del PP en Asturias, Isabel Pérez-Espinosa.

Pero Mariano Rajoy cercenó el conato de crisis y encomendó a María Dolores de Cospedal que hablase con la lideresa, ante el revuelo mediático que habían provocado unas declaraciones de Aguirre a Punto Radio: «Cascos es el mejor candidato que el PP podría presentar en Asturias», apostilló tras anunciar que no iría al Principado en apoyo de Pérez-Espinosa.

El líder del PP llegó anoche a Antena 3 para ser entrevistado con los deberes hechos. La griete estaba cerrada. Aguirre, sin dar su brazo a torcer sobre que Cascos era el más idóneo, matizó que este convencimiento no era óbice para que «una vez nominada la señora Espinosa y una vez fuera del partido el señor Cascos yo no apoye a esa candidata».

A Rajoy le preguntaron si le había sorprendido las palabras de Aguirre. «No, porque ella había expresado ya muchas veces esa opinión». Lo que dejó claro el dirigente popular es que «Aguirre, como yo, como cualquier otro militante, respetará las decisiones del partido». Dicho y hecho. «Lamento decir a los que quieren meternos el dedo en el ojo que hay una unidad absoluta en el PP, que todos apoyamos con entusiasmo a Rajoy», aclaró la propia Aguirre.

Rajoy calificó de «revulsivo» a Isabel Pérez-Espinosa y auguró que traerá «nuevos aires» a los populares en Asturias. «Y todos la vamos a apoyar», zanjó. Más escueto se mostró a la hora de hablar de su excompañero de Gobierno. Aseveró que «lamenta mucho» la decisión de Álvarez-Cascos de abandonar la que ha sido «su casa durante toda la vida». Ni una alusión a Foro Asturias. «Lo único que me preocupa es el PP», concretó.

Pese a este 'prietas las filas', lo cierto es que la presidenta de la Comunidad de Madrid amargó el regusto unitario del cónclave sevillano. Un comentario que, según ella, se lo había trasmitido personalmente a la propia Isabel Pérez-Espinosa en Sevilla y que por coherencia no podía negar. La máxima dirigente de los populares madrileños también envió un mensaje a la dirección nacional: «Ojalá que todavía hasta el 29 de marzo que se convoquen las elecciones haya tiempo para arreglarlo, pero tampoco estoy de acuerdo con algunas de las cosas que ha hecho el señor Álvarez-Cascos», agregó en alusión a la decisión del ex secretario general del PP de darse de baja en el partido.

El testimonio de Aguirre cayó como un jarro de agua helada en la dirección nacional del partido opositor. La primera en darle réplica fue María Dolores de Cospedal, que situó en el ámbito de «lo personal» el comentario de Aguirre sobre Pérez-Espinosa a la vez que recordó con énfasis que ningún presidente regional de su partido tiene potestad orgánica fuera de su comunidad autónoma. «El PP, prácticamente quitando alguna opinión como la de Esperanza Aguirre, está de una manera clara con la candidata de Asturias y por presentar a los asturianos sus propuestas y un futuro alternativo», apostilló la número dos de los populares.

Expediente informativo

La secretaria general de los populares también respondió sobre los expedientes abiertos en relación con los supuestos insultos que miembros del PP de Asturias le dedicaron a Álvarez-Cascos y los que el ex vicepresidente primero del Gobierno habría proferido contra la cúpula popular en Asturias.

«El PP no tiene jurisdicción alguna para hacer expediente a alguien que no es del partido. Esto creo que lo entiende todo el mundo». Una salida contundente, pero poco clarificadora. Cospedal no aclaró si estos expedientes se han archivado, siguen abiertos o se archivarán en breve. «El PP es un partido generoso, pero tampoco puede acoger a quien no quiere estar», abundó.

Aguirre, en cualquier caso, parece que no se contagió del ambiente de unidad y concordia que presidió la Convención de Sevilla. Claro que una justificación posible es que apenas estuvo unas horas en el hotel donde se celebraba la reunión. De hecho, la presidenta madrileña participó el sábado en un foro -en el que coincidió con Pérez-Espinosa- con otros dirigentes y candidatos regionales. Habló la primera y se marchó minutos después sin escuchar, entre otras, a la referida candidata del PP en el Principado. Alegó «compromisos personales previos» para disculpar su repentina ausencia que le impidió, además, oír el discurso de clausura de Mariano Rajoy.

«No me veo presidente». Así de tajante se mostró ayer Mariano Rajoy, pese a que las encuestas lo sitúan a más de 17 puntos de distancia del PSOE.

El líder del PP, en una entrevista en Antena 3, intentó frenar la euforia que muchos vieron en su formación durante la Convención de Sevilla. Sí admitió que está «animado y contento» porque mucha gente «quiere un cambio político» en España. Lo que no piensa hacer de ninguna manera es «vender la piel del oso antes de matarlo».

Preguntado sobre si ha vuelto el 'aznarismo', tras la presencia activa de José María Aznar en los actos del PP, respondió: «El 'aznarismo' no existe», aunque se mostró muy «reconfortado» por el apoyo que le brindó el ex presidente, «como un militante más» y anunció que contará con él en la campaña electoral.