El salvavidas de los cruceros

Cádiz puede (y debe) soñar con ser puerto de referencia para cruceros turísticos. Esto es lo que se desprende de las conclusiones a las que llegan los profesionales del sector: consignatarios, agencias de viaje y grandes navieras. Las dueñas y señoras de las flotas de buques que surcan los mares, sobre todo el Mediterráneo, llevan un tiempo ojeando las posibilidades del muelle de Cádiz. La prueba palpable de que están acercándose a la Bahía es que en los últimos quince años contabilizados (1994-2009) el número de cruceristas que atracaron en la ciudad a bordo de un buque de recreo ha pasado de 35.000 en 1994 a los más de 237.000 con que se cerró 2009. Para este ejercicio se espera que la cifra supere los 275.000 pasajeros. Y en 2011 se prevé una planificación muy parecida a la de este año en número de escalas, aunque desde la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) señalan que ha crecido mucho más el número de pasajeros que el de escalas y que para el próximo ejercicio esperan registrar un mayor crecimiento en cruceristas, hasta superar los 300.000 en un ejercicio.

Durante los dos últimos años, la atención se ha centrado en las apuestas de dos navieras que incluyeron en sus planificaciones el muelle de Cádiz como puerto base (ofreciendo el embarque y desembarque de pasajeros). MSC Cruceros fue la primera, y el año pasado comenzó su apuesta. Actualmente embarca a unos 40 pasajeros a la semana. Sin embargo, Iberocruceros llegó y subió la puja con quince escalas en las que ha rondado los 400 cruceristas embarcados desde el muelle de la ciudad.

Pero el mundo de los cruceros también es pequeño. Iberocruceros pertenece al mismo grupo empresarial que la naviera Costa Cruceros, una de las gigantes del sector, dueña de buques de gran tamaño (con capacidades que superan los 3.000 pasajeros) y reina del Mediterráneo. Actualmente tiene base propia en Barcelona y Savona (Italia). Costa Cruceros utiliza como puerto base en Andalucía el muelle de Málaga. El presidente ejecutivo de Costa Cruceros en España, Bernardo Echevarría, aseguró a este periódico que Cádiz «tiene perspectivas de convertirse en un puerto de referencia en el Mediterráneo», haciendo alusión a las travesías por las aguas de este mar. Los cruceros por el Mediterráneo son los más demandados en Europa. «Hacen falta más puertos relevantes. Ya tenemos Barcelona, Valencia, Alicante y Málaga pero también tienen sus limitaciones y Cádiz se está revelando como una opción interesante». Ya lo apuntó la consignataria de Baleares, Gema Rosso, la entrada de Iberocruceros era más interesante aún por la conexión que tiene con las grandes navieras internacionales, como Costa. Royal Caribbean es otra de las grandes navieras del mungo y también opera con el puerto de Cádiz, aunque sólo con escalas de un día. Sus directores comerciales conocen ya la nueva terminal de pasajeros del muelle y siguen el crecimiento de este punto del mapa.

Pero esta ciudad tiene competencia. Hace un par de meses la ciudad de Bilbao organizó una reunión de las principales navieras para conocer cuáles eran las exigencias de esta firmas para considerar que un puerto es lo suficientemente atractivo. Echevarría explicó que el sector de cruceros no es El Dorado, que se trata de un negocio en el que hay que invertir para avanzar, «nosotros construimos al menos un barco cada año, por un montante de unos 300 millones de euros». Algo en lo que coindicen consignatarios (como el director de Cadiship, Emilio Medina), directores comerciales y planificadores es que todos los agentes sociales de la ciudad que quiera ser puerto estratégico han de remar en la misma dirección. «Conozco ciudades donde hay problemas con el comercio, que las instituciones no apoyan lo suficiente o que la gente no es acogedora. Y esto no funciona así», sentenció Echevarría.

Las navieras valoran también que la imagen que vende Andalucía en el extranjero es muy potente y apenas habría que incidir en este aspecto porque Cádiz encaja con la gastronomía (tapas), toros, vino, gente y ciudades históricas.

Pero ahora mismo el puerto no podría vivir hoy sólo de buques turísticos, según argumentan desde la APBC. Ni con los ingresos provenientes exclusivamente del tráfico de cruceros podrían acometerse las mejoras previstas. Por eso el puerto de Cádiz apostó hace años, cuando hizo su primer plan estratégico, por diversificar su oferta. En estos años se está potenciando no sólo a los cruceros, sino también el tráfico de mercancías en sus diferentes formas: el de graneles sólidos, el de graneles líquidos, el de ro-ro (con nuevas y modernas rampas, ahora con el Marqués de Comillas), la pesca (remodelando la lonja de Cádiz y construyendo una nueva zona pesquera en El Puerto) y los contenedores (con la nueva terminal proyectada).