ESPAÑA

Dos mujeres mueren a manos de sus parejas en Gerona y Cuenca

GERONA / CUENCA. Actualizado: Guardar
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Dos nuevos casos de violencia de género. El primero de ellos en Cuenca, en el que una mujer murió a manos de maridos, y el otro en Gerona, donde otra víctima fue lanzada desde un sexto piso por su ex pareja.

En la localidad conquense de Landeta, Felicia López, de 68 años, murió de varias puñaladas que le infligió su marido, Pedro Luis M.M., de 77. El agresor, que padece trastornos mentales fue detenido.

Según informaron fuentes de la subdelegación del Gobierno, el presunto autor de los hechos, que no tenía ninguna denuncia por malos tratos, ingresó por orden judicial en la Unidad de Salud Mental del hospital Virgen de la Luz de Cuenca .

El otro caso de violencia de género tuvo lugar en Gerona. Allí, una mujer murió a manos de su ex pareja. La víctima, Olena K., de nacionalidad ucraniana y de 37 años, estaba trabajando como asistenta en una vivienda situada en su sexto piso, lugar desde donde supuestamente el hombre la arrojó al vacío y acabó con su vida.

Los hechos ocurrieron hacia las 10.30 de la mañana. La mujer vivía cerca del lugar en el que murió y como todos los días había acudido a un edificio próximo a hacer las labores domésticas. Hafid C., el presunto homicida, se presentó por sorpresa en el inmueble y, según fuentes de la investigación, tras una fuerte discusión el hombre, un marroquí de 33 años, la empujó desde el balcón, causándole la muerte casi al instante. Antes de que su ex pareja cometiera el brutal asesinato, la mujer tuvo tiempo de llamar al propietario del piso para pedirle que llamara a la Policía. Demasiado tarde porque cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, se encontraron a la joven sin vida y rodeada de un gran charco de sangre.

Uno de los testigos que se encontraba en ese momento en la calle relató que estaba trabajando en un edificio contiguo y que tras escuchar los gritos de los vecinos acudió a tratar de socorrer a la víctima, pero no pudo hacer nada, tras comprobar que la mujer ya no tenía pulso.