Ciudadanos

Una familia de Vejer plantea la primera denuncia por desaparición de su bebé

Unos padres perdieron un hijo en 1974 en la clínica San Rafael, a los 19 años el ataúd fue abierto y no hallaron restos humanos

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Le dijeron que su hijo recién nacido había fallecido tan sólo un día después de haber nacido en la clínica San Rafael de Cádiz, en septiembre de 1974. Jamás vieron su cuerpo, pero celebraron el sepelio en el antiguo cementerio de San José. 19 años después, cuando quisieron trasladar el féretro a otro camposanto se encontraron con un ataúd sin restos humanos. Las incógnitas se fueron acumulando pero también fue pasando el tiempo. Hasta que hace unas semanas comenzaron a salir testimonios de otros padres que dudaban del fallecimiento de sus hijos y sospechaban de que podrían haber sido robados. Las coincidencias en fechas y, sobre todo, con el mismo centro hospitalario, llevó ayer a una familia de Vejer a presentar la primera denuncia ante la Fiscalía de Cádiz, que sólo tenía encima de la mesa algunas informaciones sin hilvanar, ningún dato concreto y, sobre todo, ninguna petición formal de estas características. La respuesta del Ministerio Público ha sido incoar unas diligencias previas para indagar en este caso concreto. De esta manera, se abre la segunda investigación en torno a unos episodios que habrían sucedido durante la etapa franquista en la provincia de Cádiz; después de que la Fiscalía de Algeciras hiciera lo propio hace escasos días.

La fiscal jefe, Ángeles Ayuso, viene apelando a la prudencia desde que saliera a la luz el primer testimonio sobre una posible desaparición en La Línea. Cautela porque han transcurrido muchos años y los posibles delitos habrían prescrito ya; y porque las probabilidades de encontrar pruebas contundentes son pequeñas. Pese a las dificultades, desde el Ministerio Público se decidió ayer abrir diligencias para tratar de arrojar algo de luz al caso. Precisamente fue la misma Ángeles Ayuso la que recibió personalmente la denuncia.

Hasta ahora habían trascendido cuatro casos de neonatos que nacieron en San Rafael y Zamacola. Si bien, todos ellos fueron atendidos por personal de la Residencia que a mediados de los 70 cerró sus puertas para enfrentarse a una profunda remodelación que concluiría con la inauguración del actual Puerta del Mar. Durante ese periodo de obras, los pacientes eran atendidos en San Rafael y así ocurrió con los ahora denunciantes.

En su escrito aseguran que el bebé nació en la medianoche del 24 de septiembre de 1974. Tras el alumbramiento le informaron de que el niño presentaba problemas y debía ser intervenido. No obtuvieron más información, según relatan, hasta el día siguiente cuando una enfermera les dijo que había fallecido.

El padre reclamó en varias ocasiones que le dejaran ver a su hijo, pero asegura que nunca se lo permitieron. Los supuestos restos mortales fueron enterrados en el cementerio de la capital. En 1993 tuvieron que sacar el féretro para llevarlos a otro camposanto más próximo a su localidad. Cuando le abrieron el ataúd tan sólo había unas prendas pero no había restos humanos.