Irán y las grandes potencias fijan un marco para el diálogo nuclear

La delegación iraní y el denominado 'Grupo 5+1' -integrado por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania- han acordado en Viena un marco para el diálogo nuclear que debe llevar, en seis meses, a un pacto definitivo, según ha asegurado el segundo del equipo enviado por Teherán, Abás Araqchi.

Los grupos negociadores, encabezados por el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, y la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, han fijado un plan de acción y un marco de trabajo para los próximos pasos. Araqchi ha recalcado que el diálogo se ha celebrado en "un clima positivo".

Un día antes de la reanudación de las conversaciones el pasado martes, el líder supremo iraní, Alí Jameneí, se mostró escéptico y aseguró que la reunión "no llevará a ninguna parte". En la misma línea se pronunció ayer el jefe del cuerpo de Guardianes de la Revolución, Mohamad Ali Yafari, quien afirmó que la negociación traería "problemas" e instó a la delegación a "no cruzar las líneas rojas", esto es, renunciar al avance del programa nuclear.

Las reuniones de Viena han estado en esta ocasión más centradas en pactar la agenda de trabajo de los próximos meses que en discutir los asuntos más polémicos del programa nuclear iraní. Además de los encuentros conjuntos, también se han producido reuniones bilaterales, entre las que destaca la celebrada el martes entre representantes de EE UU e Irán, dos estados que llevan décadas sin relaciones diplomáticas.

Con este proceso, Teherán y la comunidad internacional tratan de poner fin a una crisis nuclear que se prolonga desde hace una década por los temores de que el programa atómico iraní pueda tener fines militares, extremo que niega Irán, y que ha llevado a instaurar duras sanciones económicas contra la República islámica.