Los 1,65 kilómetros del nuevo acceso al aeropuerto de Málaga cuestan 44 millones de euros

El Gobierno de España anunció el pasado lunes que el nuevo acceso al aeropuerto de Málaga por el norte se comenzará a construir en 2018 , pese a los elevados costes de la obra, que se debe acometer para dar acceso al área aeroportuaria desde la zona de Alhaurín de la Torre. Según los datos ofrecidos por la Delegación de Gobierno en Andalucía, la obra tendrá un coste de 44 millones de euros. 41,8 de esos millones son los correspondientes a los trabajos de construcción y los 2,2 millones de euros restantes pertenecen a la asistencia técnica para el control y vigilancia y a las expropiaciones que deben producirse para poder llevar a cabo la nueva entrada.

Este acceso norte tendrá una longitud de 1,65 kilómetros y conectará con la «hiperronda» a Málaga, donde en la actualidad no se puede acceder directamente desde esta infraestructura estratégica para la región. Según el Gobierno, el trazado tiene su origen en el enlace de Churriana en la A-7 y finaliza en el límite del sistema general de carreteras del aeropuerto de Málaga, entre el núcleo de Zapata y la cabecera norte de la pista actual. Desde ahí será Aeropuertos Españoles y Navegación Area (AENA) la que continúe con la obra. Será hasta ese punto hasta donde se inviertan una media de 26,6 millones de euros por cada 1.000 metros construidos.

Este alto coste se debe, según el jefe de Demarcación de Carreteras de Andalucía Oriental del Gobierno, José del Cerro, a las características geotécnicas del trazado. La carretera va a discurrir, según lo explicado, por suelos blandos y ello obliga a que aproximadamente el 30 por ciento del trazado diseñado vaya sobre estructuras . Luego también hay que contabilizar los numerosos servicios básicos que se van a ver afectados por las obras, que tienen una duración de 36 meses, y que deberá lidiar con líneas eléctricas, telefónicas e incluso carreteras, como es el caso de la A-7051. Del Cerro aseguró que se incluye una estructura, con un coste de unos 15 millones de euros, que debe hacer compatible el nuevo acceso con el futuro vial distribuidor que debe construir la Junta de Andalucía.

La calzada de salida tendrá dos carriles y la de entrada tres . Se han proyectado dos ramales directos de conexión. Uno en el origen para facilitar la conexión directa con el aeropuerto de los vehículos procedentes de la Costa del Sol Occidental. Otro hacia los viales de la urbanización norte del aeródromo. También se hará la reposición de la A-7051, mediante un vial de 895 metros que conectará con la carretera antigua y salvará con un paso superior el acceso norte al aeropuerto. También el futuro vial metropolitano distribuidor y el encauzamiento de los arroyos Ciriano y Bienquerido. Por último, para mejorar los accesos desde el Valle del Guadalhorce está previsto el desdoblamiento del ramal de conexión entre la A-7 y las carreteras autonómicas A-7052 y A-404 .

«Supondrá una mejora muy sustancial de la movilidad en toda la zona del aeródromo», reseño el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que apuntó que, según los estudios de movilidad efectuados, la nueva vía podrá absorber entre 10.000 y 12.000 vehículos diarios . Elías Bendodo dijo que era una obra «estratégica» y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, instó a l a Junta de Andalucía a ejecutar «el vial distribuidor porque es una obra adjudicada, parada y que debe hacerse». Con la infraestructura que debe acometer la Junta de Andalucía la capacidad en el acceso norte se incrementaría a unos 14.000 vehículos diarios, según los estudios.