La alcaldesa de Córdoba no quiere ni obligar ni prohibir a los ediles ir a actos religiosos

«Sobre la presencia de los concejales en procesiones y actos religiosos, no estoy a favor de que se obligue ni de que se prohíba». La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, se ha mostrado así de clara al hablar de la moción que presentarán este viernes Ganemos e Izquierda Unida en el Pleno del Ayuntamiento para, entre otros asuntos, impedir la presencia de los ediles en este tipo de actos.

Ambrosio se ha desmarcado así de la propuesta de la agrupación de electores auspiciada por Podemos, y no se ha referido a la propuesta de crear fiestas locales de carácter cívico o laico. «No figura en la redacción de la moción», ha dicho. La alcaldesa se ha remitido a lo que dice el acuerdo firmado con Ganemos y con Izquierda Unida para la investidura, y eso dice que se seguirá avanzando «en la laicidad del Ayuntamiento y que se eliminará la obligatoriedad de que los concejales asistan a los actos religiosos».

Para ella, los sentimientos religiosos «quedan dentro del ámbito de lo personal», y por eso no está a favor de prohibir ni de obligar. Su partido no se moverá del acuerdo ya firmado, porque al hacer un acuerdo de ese tipo «siempre se renuncia a una parte». Sobre la posible presencia de Ganemos en el Gobierno municipal, insistió en que «oficialmente no hay nada». Se sigue en la situación de no estar en el Gobierno, pero sí apoyarla. Les ha lanzado un mensaje de tranquilidad, con la seguridad de que «hay un nuevo modelo de gestión y un acuerdo», aunque sí se ha mostrado abierta a «analizar y evaluar» junto con Ganemos e IU. «A petición de cualquiera de ellas se puede abrir un proceso de análisis», ha insistido.

La alcaldesa también se ha referido a la subida prevista de un 4 por ciento en los tributos municipales y ha recordado que el documento todavía ni siquiera ha pasado por la Junta de Gobierno local. Sí se está estudiando que los ingresos estén equiparados con las inversiones, «para seguir prestando servicios desde lo público y mejorar las inversiones». Por eso, y ante la previsión de que puedan mermar los ingresos que reciba el Ayuntamiento, se tiene que contemplar la subida de impuestos. «Este Gobierno debe ser consecuente y se va a hacer un documento lo más equilibrado posible y sin pedir ni un euro más de lo que se va a invertir», ha concluido.