El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha visitado el estado de Nueva Jersey, uno de los más afectados por el huracán Irene. En concreto, ha estado en la ciudad de Wayne, donde más de un centenar de personas fueron evacuadas. El gobierno ha declarado la localidad  "zona catastrófica" lo que le permitirá destinar fondos para su reconstrucción. Durante su visita el presidente de Estados Unidos, ha hablado con los vecinos de la localidad, a algunos de los cuales ha dado consuelo y su palabra de que hará todo lo posible para recuperar la zona.