Diez lugares que marcaron la vida de Isabel la Católica
Una ruta por los enclaves que vieron nacer, casarse o morir a una reina
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12345678910Madrigal de las Altas Torres (Ávila)
Madrigal de las Altas Torres es el lugar de nacimiento de Isabel de Castilla un 22 de abril. La hija de Juan II de Castilla y de su segunda mujer, Isabel de Portugal nació un Jueves Santo de 1451 en el palacio que hoy ocupa el Monasterio de Nuestra Señora de Gracia.
Localidad posee uno de los escasos ejemplos de murallas medievales de estilo mudéjar que se conservan en España. Las partes que se pueden ver —que mezclan lo románico, lo gótico primitivo y lo mudéjar— corresponden a los siglos XIII-XIV, aunque varias de ellas han sido reconstruidas.
En el antiguo palacio de Juan II, transformado en el monasterio de Nuestra Señora de Gracia se puede acceder a diversas dependencias, como el Salón de Cortes o la alcoba donde fue alumbrada la reina Isabel la Católica en 1451.
Arévalo (Ávila)
Castillo de Arévalo La villa de Arévalo está ligada a la infancia y adolescencia de Isabel la Católica. A la muerte del padre de Isabel en 1454 esta fue enviada con su madre y su hermano Alfonso a la villa de Arévalo, donde vería los ataques de locura de su progenitora.
La población tiene una importante muestra del mudéjar abulense y ha sido declarada Conjunto Histórico Artístico. En su casco urbano existen numerosos lugares de interés, como las plazas de la Villa o del Arrabal, y multitud de edificios religiosos, entre los que destacan la iglesia de Santa María la Mayor; la de San Martín, que posee dos estilizadas torres; la de San Miguel y la de Santo Domingo de Silos. Sobresale asimismo su imponente castillo, restaurado en ladrillo con una excepcional torre del Homenaje de forma circular donde vivió, durante algún tiempo, la reina Isabel la Católica.
Segovia
Alcazar de Segovia La ciudad de Segovia fue muy importante en la vida de Isabel la Católica. Con 10 años es trasladada junto a su hermano Alfonso a esta localidad donde se emplazaba la Corte y años más tarde, el 13 de diciembre de 1474 fue donde se proclamó Reina de Castilla.
Segovia, Ciudad Patrimonio de la Humanidad, ofrece monumentos únicos que van desde el acueducto romano -uno de los mejor conservados del mundo-; el Alcázar -palacio real situado en lo alto de una roca entre los ríos Eresma y Clamores y una de las residencias favoritas de los Reyes de Castilla; la Catedral de Santa María -la última catedral gótica que se construyó en España o el barrio judío y las casas señoriales.
Toros de Guisando
Cuenta la historia que a pesar de las presiones de los nobles, Isabel rechazó proclamarse reina mientras Enrique IV -su hermanastro- estuviera vivo. Por el contrario, consiguió que este le otorgase el título de Princesa de Asturias, en una discutida ceremonia que tuvo lugar en los Toros de Guisando, el 19 de septiembre de 1468, conocida como la Concordia de Guisando.
Los Toros de Guisando son un conjunto escultórico vetón que se ubica en la localidad de El Tiemblo (Ávila). Se trata de cuatro esculturas realizadas en granito que representan toros.
Gracias al tratado, firmado en este lugar, Isabel era reconocida Princesa de Asturias y heredera a la corona.
Ocaña
La ciudad de Ocaña acogió a Isabel a partir de 1468 una vez proclamada heredera al trono. Hoy en día su conjunto urbano, de trazado medieval es uno de los más importantes de Castilla-La Mancha.
La Plaza Mayor, construida en 1.777, tiene planta rectangular con 18 arcos en los dos lados mayores y 17 en los dos menores, y dos pisos de balcones y buhardillas, es el centro neurálgico de la villa. Entre los edificios religiosos sobresalen la iglesia parroquial de San Juan Bautista, de los siglos XIII al XVII; y los conventos de Santo Domingo, de construcción renacentista con un claustro de dos alturas; el de Carmelitas Descalzas, el de Dominicas de Santa María y el de las Bernardas, todos del siglo XVI. Entre los edificios civiles cabe mencionar el palacio de los Cárdenas; la torre de San Martín, renacentista del siglo XVI; el rollo de justicia, del siglo XV; y el teatro Lope de Vega, antiguo colegio de Jesuitas en el que despuntan la portada de piedra y la torre mudéjar.
Valladolid
Colegio Mayor Santa Cruz La ciudad de Valladolid vio como se unían Isabel y Fernando en matrimonio tras negociar Juan II de Aragón la boda de su hijo con la heredera al trono de Castilla. El 19 de octubre de 1469 firmaron su compromiso matrimonial en el Palacio de los Vivero.
Valladolid conserva un importante patrimonio monumental en su casco antiguo, en especial casas nobles y edificaciones religiosas. Entre ellas sobresalen la Catedral; la iglesia gótica de Santiago, con un importante retablo de la Adoración de los Magos realizado por Berruguete en 1537, o la iglesia de Santa María la Antigua.
En pleno corazón de la ciudad la Plaza Mayor, del siglo XVI. En uno de sus lados se alza el Ayuntamiento, edificio de principios de siglo que se encuentra coronado por la torre del reloj. En las calles aledañas aparece un buen número de casonas y palacios. El palacio de los Pimentel, hoy sede de la Diputación Provincial, es uno de los más importantes, ya que en él nació el 21 de mayo de 1527 el rey Felipe II; la fachada barroca de la Universidad o la Casa de Cervantes, donde vivió el autor del Quijote con su familia entre 1603 y 1606.
Alcalá de Henares
Alcalá de Henares fue una de las ciudades más frecuentadas por Isabel y Fernando residiendo en ella en momentos importantes de su vida como fue el nacimiento de su hija Catalina, el 15 de diciembre en 1486, quién más tarde sería reina de Inglaterra.
La ciudad es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco gracias a su rico patrimonio monumental, formado por iglesias, conventos y dependencias universitarias.
Desde la Universidad con la Hostería del Estudiante de Paradores de Turismo hasta la Catedral, construcción gótica a la que se le adosó una torre herreriana en el siglo XVII son muchos los edificios y palacios de esta villa. Cabe destacar el Palacio Arzobispal donde vivieron los Reyes Católicos durante largas temporadas, los soportales de la Calle Mayor o la Casa Museo de Cervantes.
Monasterio de San Juan de los Reyes en Toledo
Tras la guerra de Sucesión Castellana (1475-1479) Isabel mandó construir el Monasterio de San Juan de los Reyes. El Monasterio de San Juan de los Reyes, en Toledo de la Orden Franciscana, fue construido bajo el patrocinio de la reina Isabel I de Castilla con la intención de convertirlo en mausoleo real, en conmemoración de la batalla de Toro y del nacimiento del príncipe Juan. Es una de las más valiosas muestras del estilo gótico isabelino en España y el edificio más importante erigido por los Reyes Católicos. El monasterio es, además, un monumento conmemorativo de los logros de los Reyes Católicos y de su programa político.
Finalmente no fue el lugar de enterramiento de los Reyes Católicos que optaron por Granada.
Medina del Campo
A principios de 1.500 la corte estaba instalada en Medina del Campo (Valladolid) cuando se declaró la grave enfermedad de la reina que moriría en el Palacio Real de esta localidad el 26 de noviembre de 1504.
La localidad, que ha sido declarada Conjunto Histórico-Artístico, cuenta con un magnífico compendio de monumentos y bellos rincones. Lo más destacado es el castillo de la Mota, del siglo XV con la torre del Homenaje, el patio de armas, la capilla y el tocador de la reina.
En una esquina de la porticada Plaza Mayor se halla el Palacio donde murió, en 1504, la reina Isabel la Católica. Su estatua preside este histórico enclave. Recorriendo el casco urbano surgen además otros tesoros como el palacio de los Dueñas, edificio renacentista-plateresco residencia de Carlos I; la colegiata de San Antolín, gótica del siglo XVI o el hospital de Simón Ruíz, que cuenta con un gran patio herreriano.
Granada
Landahlauts La reina Isabel fue inhumada en el monasterio de San Francisco de la Alhambra de Granada, el 18 de diciembre de 1504, en una sencilla sepultura, según su deseo. Poco después, sus restos mortales, junto con los de su esposo Fernando el Católico, fueron trasladados a la Capilla Real de Granada. Su hija Juana I y el marido de ésta, Felipe el Hermoso, también reposan allí. Asimismo se enterró en este lugar a su nieto Miguel de la Paz, hijo del rey Manuel I de Portugal y la infanta Isabel de Aragón, quien falleció poco antes de cumplir los 2 años de edad.
En el museo de la Capilla Real se encuentran la corona y el cetro de la reina, quien además dotó a la Capilla de un importante grupo de cuadros (aún in situ), de Botticelli, Dirk Bouts, Rogier van der Weyden y Hans Memling, entre otros, y muchas de sus pertenencias personales.
