Diez de los mejores restaurantes de pescado en España

Aponiente

Los españoles somos los mayores consumidores de pescado de Europa y, junto con los japoneses, estamos entre los primeros del mundo. En España abundan los buenos restaurantes especializados, en los que los productos del mar, mariscos y pescados, se convierten en protagonistas absolutos. Hemos seleccionado diez donde el nivel es altísimo, conscientes de que muchos se quedan en el tintero porque la lista sería inacabable.

Aponiente

No es casualidad que a Ángel León, uno de los más brillantes cocineros españoles, se le conozca como «el chef del mar». Con sus merecidas dos estrellas Michelin, Aponiente ocupa un espectacular emplazamiento, un molino de mareas situado a la orilla misma del mar. La de León es cocina del mar en estado puro. Un menú que únicamente incluye pescados, algunos de ellos poco habituales, los llamados «de descarte». Por no hablar del placton marino, con el que lleva años trabajando con excelentes resultados. Cocina marinera de vanguardia que no olvida nunca el recetario tradicional gaditano con el que se crió el cocinero.

APONIENTE. Molino de Mareas El Caño. Francisco Cossí Ochoa, s/n. El Puerto de Santa María (Cádiz).

Elkano

La casa de la familia Arregui es sin duda el mejor asador de pescado de España. El patriarca de la familia, Pedro, ya fallecido, fue el primero en poner sobre las brasas un cogote de merluza. Allí manejan una materia prima de lujo que se trata con todo el mimo posible en la parrilla. Las estrellas son los rodaballos. Ninguno de los que ofrecen baja del kilo y medio, todos capturados en la zona. No desmerecen unos lenguados descomunales, que superan de largo el kilo de peso, y cuyas huevas, poco apreciadas por el gran público, se pasan también por las brasas y constituyen un bocado exquisito. Además, almejas simplemente abiertas al fuego, lomos de caballa, ijada de mero, cocochas de merluza, chipirones… Por si fuera poco, Aitor Arregui trasmite su pasión y su conocimiento de cada pescado.

ELKANO. Herrerieta, 2. Guetaria (Guipúzcoa).

D'Berto

Si en Galicia el producto es excepcional, esta casa es uno de los templos de ese producto. En pocos sitios se pueden encontrar mariscos y pescados como los que aquí se preparan. Y en menos aún unos puntos de cocción tan impecables. Berto Domínguez se ocupa personalmente de comprar esos pescados, casi siempre de gran tamaño, que luego lucen en las vitrinas del local: meros, lubinas, rodaballos, langostas, bogavantes... Todo un espectáculo. De la cocina se ocupa su hermana Marisol.

D'BERTO. Teniente Domínguez, 84. O'Grove (Pontevedra).

Real Balneario de Salinas

Enclavado en la misma playa de Salinas, con grandes ventanales sobre el mar, la situación de este restaurante es verdaderamente espectacular. La familia Loya ha conseguido convertirlo en referente de la mejor cocina del mar en Asturias. Platos modernos, muy sensatos, en los que los mejores pescados y mariscos del Cantábrico son tratados con mimo y acierto. Mención especial para los bogavantes asturianos, santo y seña de la casa; para los espectaculares percebes del Cabo Peñas; y para el virrey, un pescado ahora muy valorado y que los Loya fueron pioneros en llevar a los restaurantes de alta cocina. El que hacen con su marmita es un lujo, respetando al máximo la delicadeza de su carne y potenciándola con un sutil caldo. Además, salmonetes, mero, y un clásico de la casa, la lubina al champán. Cuentan además con una gran bodega.

REAL BALNEARIO DE SALINAS. Salinas (Asturias).

Los Marinos José

Sin duda el mejor restaurante de producto marino de Andalucía, y uno de los grandes de España. En el paseo marítimo de Fuengirola, junto a la playa, la familia Sánchez ofrece una variedad de pescados y mariscos espectacular. No hay carta fija porque siempre trabajan con lo mejor del día. Pescados al horno, fritos o a la plancha, siempre con puntos perfectos y sin más complicaciones. Aunque no hace ascos a servir pescados de otras costas españolas, los mejores son los que proceden de Fuengirola y sus alrededores: bolos y busanos, quisquillas (con las que hacen un excelente tartar), almejas pequeñas y sabrosas, frituras de huevas de calamar, de hígado de rape o de gambas; excelentes boquerones; cigalas de tamaño gigante, o una gallineta de la que primero se sirve el cogote frito y luego el resto.

LOS MARINOS JOSÉ. Paseo Marítimo Rey de España, 161. Fuengirola (Málaga)

El Campero

Cuando se habla de atún rojo de almadraba es inevitable pensar en este restaurante de Barbate que se ha hecho célebre por las inumerables formas que tienen de elaborar este apreciado pez. Siempre piezas capturadas en las almadrabas de la costa gaditana. Recetas tradicionales como el atún encebollao o en adobo que se alternan con propuestas más modernas, pero siempre sencillas y respetando por encima de todo el excelente producto que maneja su propietario, Pepe Melero. Resulta difícil elegir: huevas secas y mojama; sashimi de ventresca al estilo japonés; jugoso tartar; el corazón, a la plancha; el morrillo que dio fama a esta casa; la ventresca a la plancha; el mormo encebollado al estilo gaditano; o el delicado galete (cococha) estofado, cuya textura recuerda la de las carrilleras. Toda una lección de anatomía del atún, y de cómo despiezarlo. Hay más cosas. La vitrina que hay en la entrada exhibe toda la riqueza que aportan la costa entre Tarifa y Conil: lubinas, doradas, meros, bocinegros, corvinas, besugos, urtas… Además de gambas de Huelva, langostinos de Sanlúcar y otros mariscos.

EL CAMPERO. Avenida de la Constitución. Barbate (Cádiz).

O'Pazo

Lleva más de medio siglo siendo uno de los referentes de las marisquerías madrileñas. Pescados y mariscos de la máxima calidad son su seña de identidad. Algo tiene que ver en ello que la familia García, sus propietarios, lo son también de Pescaderías Coruñesas, toda una garantía de que la materia prima que llega a esta casa ha sido seleccionada con especial mimo. A O'Pazo se va a lo que se va. Y cualquier duda queda despejada desde el momento en que se traspasa la entrada y se ve la espectacular barra acristalada en la que se exhibe toda una tentadora gama de «joyería» marina. Ostras, percebes, almejas, nécoras, centollos, bogavantes, camarones, cigalas, gambas blancas y rojas, carabineros, incluso angulas, ese lujo de otros tiempos. Y toda una colección de pescados con la máxima frescura. Producto con mayúsculas. Que además se sirve sin salsas ni aderezos que distraigan la atención.

O'PAZO. Reina Mercedes, 20. Madrid.

Rías de Galicia

Cuando se habla de marisco y de pescado, esta es la referencia en Barcelona. La familia Iglesias se ocupa de conseguir el mejor producto marino para su restaurante, tanto de las costas del Mediterráneo como del Atlántico o el Cantábrico. En la planta baja está la marisquería tradicional, con una amplísima oferta sin parangón en la Ciudad Condal: angulas, percebes, ostras, gambas rojas y blancas, langostas, centollos, bogavantes, cigalas, navajas, camarones, almejas... En la planta superior cuentan con otro espacio, llamado Espai Kru, donde sirven pescado crudo en distintas elaboraciones, siempre sin fuego, en forma de tapas, principalmente japonesas y peruanas. Moluscos, crustáceos y pescados de primera calidad en carpaccios, tartares, marinados, ceviches...

RÍAS DE GALICIA. Lleida, 7. Barcelona.

Güeyu Mar

Situado en la playa de Vega, junto a Ribadesella, es de los pocos asadores que rompen la hegemonía de los vascos a la hora de hablar de pescados y mariscos a la brasa. Abel Álvarez maneja en las parrillas un gran producto, procedente en su mayor parte del Cantábrico. Piezas que muestra en las vitrinas que dan paso al comedor y que son una verdadera tentación. Aquí no hay carne, sólo pescado y marisco que Abel busca con ahínco por toda la costa asturiana. Y que sirve en estado puro, sin salsas ni acompañamientos, simplemente hechos en las brasas. Chipirones, ventresca de bonito, salmonete, lubina, rodaballo, mero, rape, ostras... y por encima de todos, el virrey, un pescado con el que el cocinero luce su mejor técnica.

GÜEYU MAR. Playa de Vega, 84. Ribadesella (Asturias).

Bar FM

Nada hace sospechar que tras la fachada de este modesto bar situado en un barrio alejado del centro de Granada se encuentre uno de los mejores sitios de España para comer pescados y mariscos. Eso sí, nada de comodidades. Una barra de acero inoxidable con algunos taburetes altos y poco más. Además, no reservan, por lo que conviene llegar pronto para hacerse con un hueco. Paco Martín, el propietario, busca el mejor producto de las costas granadinas, aunque no le hace ascos a los de otras zonas de España. En la pequeña cocina del local, Rosa Macías, la mujer de Martín, se ocupa de darle el punto exacto a ese producto tanto en la plancha como en la sartén. Su pulpo seco tiene merecida fama. Las quisquillas de Motril, tan buenas que se sirven incluso crudas en ocasiones; las cigalas; las gambas blancas; las puntillitas a la plancha; las frituras impecables de boquerones, pijotas, ortiguillas o salmonetes... todo garantiza el máximo disfrute.

BAR FM. Avenida Juan Pablo II, 54. Granada. 958 15 70 04.