ricardo-blazquez

Ángel Antonio Herrera

Un tal Ricardo, peatón de prestigio

Parece que estuviera siempre huyendo de su lámina de seductor apabullante, porque se le desabrocha enseguida cierta humildad, y porque es espíritu que no gusta del oropel

Sevilla da el último adiós a su querido cardenal riosecano Carlos Amigo

ABC