Jóvenes en una licorería
Jóvenes en una licorería - REUTERS

Si bebes vodka-Red Bull es más probable que hagas una tontería, y no es por la borrachera

Un nuevo estudio sugiere que existe un efecto placebo en los consumidores de esta combinación

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En 2013, un estudio descubrió que las personas que consumían alcohol mezclado con una bebida energética como Red Bull tenían el doble de probabilidades de participar en un accidente de coche o en una agresión sexual que aquellos que solo bebían alcohol. Ahora, un nuevo estudio sugiere que el efecto placebo puede tener parte de la culpa.

La investigación llevada a cabo por la escuela de negocios INSEAD de París y la Universidad de Michigan revela que las personas se sienten más ebrias, y actúan conforme a ello, si su cóctel estaba etiquetado como «vodka-Red Bull», en vez de como simplemente vodka con zumo, pese a tener el mismo contenido.

Los investigadores escogieron a 154 jóvenes parisinos y a todos les sirvieron la misma bebida: una mezcla de vodka, zumo de frutas y Red Bull.

Sin embargo, solo un tercio fue avisado del contenido real. Otro tercio pensó que bebía un «cóctel de vodka», y el resto, un «cóctel con zumo de fruta».

Después de beber, los sujetos recibieron tres tareas. Primero jugaron a un videojuego. Después les mostraron fotografías de 15 mujeres y los investigadores les preguntaron si pensaban si podrían conseguir su teléfono en un bar. Por último, respondieron a una encuesta en la que describían su estado de ebriedad durante el experimento y cuánto tiempo esperarían antes de conducir, entre otros puntos.

Los resultados mostraron una clara tendencia. Aunque los tres gupos bebieron lo mismo, el grupo de jóvenes que leyó «vodka-Red Bull» en sus vasos aseguró sentirse mucho más borracho que el resto. Además, también corrieron más riesgos (medido con su actitud durante el videojuego) y tuvieron mucha más confianza a la hora de acercarse a las mujeres, expresando una mayor certeza de poder obtener su número. De hecho, el grupo del vodka-Red Bull se centró en las cinco mujeres que fueron calificadas por todos como las más guapas de las 15.

Ningún joven de este grupo pensó que alguna de esas chicas estuviera fuera de sus posibilidades. En cambio, el resto de jóvenes que tomaron la misma bebida, pensando que solo llevaba zumo de frutas, pensaron que esas mismas mujeres estaban fuera de su alcance y eran mucho menos propensos a ir tras ellas.

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