McDonald's sirve a una mujer embarazada un producto de limpieza en vez de un café
La empresa pidió perdón tras la denuncia de la víctima, la cual tuvo que ser asistida por los Servicios de Salud
Los hechos ocurrieron en un McDonald's de Alberta, Canadá, cuando Sarah Douglas, una mujer embarazada que estaba llevando a uno de sus hijos a jugar un partido de béisbol, decidió darse un minuto de descanso para tomar un café.
Tras pararse a comprarlo en un servicio de autos, se marchó para continuar su viaje en coche. Al darle un sorbo, descubrió que el sabor era extraño, para más tarde darse cuenta, de que lo que sabía diferente era el nuevo componente, ya que llevaba líquido de limpieza.
Douglas decidió volver al McDonald's para quejarse y pedir explicaciones, ya que podría haber supuesto un daño irreparable para su bebé. Un empleado de la empresa pidió perdón y le dio las explicaciones oportunas, asegurando que todo había ocurrido porque «dos líneas de limpieza se encontraban unidas a la máquina de café justo en el momento en el que se preparó la bebida».
Preocupada por su salud, la víctima llamó a Servicios de Salud de Alberta al verse en una situación de un posible envenenamiento, según cuenta el medio «The Globe and Mail».
El equipo médico informó que los inspectores de salud se encontraban investigando los hechos ocurridos . Nada más lejos de la realidad, McDonald's aseguraba que ya se habían realizado las indagaciones pertinentes y que todo estaba correcto.
Tras la denuncia de la mujer, que en la actualidad se encuentra en su semana 32 de embarazo, un portavoz de la empresa lanzó un comunicado para pedir perdón en nombre de Dan Brown, el responsable de ese establecimiento de comida rápida.
En el comunicado, Brow detalla que «la máquina estaba siendo limpiada, como cada mañana. Desafortunadamente, la línea de suministro de leche se conectó a la solución de limpieza mientras se tomaba la bebida de la mujer ».
En su mensaje agregó que habían tomado las medidas necesarias para revisar los procedimientos de limpieza, y que han puesto «señalización adicional como un recordatorio» para evitar futuras confusiones.
Douglas respondió al comunicado diciendo que el motivo que le había llevado a compartir su «desagradable experiencia» era asegurarse de que «no volviera a suceder y que nadie más estuviera en riesgo».
