La OMS alerta sobre el resurgimiento de las enfermedades infecciosas

La directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS),Margaret Chan, declaró ayer en Ginebra que, a pesar de la globalización y de la intensa mobilidad humana, el mundo no está preparado para enfrentarse con las epidemias causadas por las enfermedades infecciosas ni tampoco para gestionar sus consecuencias.

Chan hizo estas declaraciones en su discurso de apertura de la 69 Asamblea General de la OMS, que se celebra está semana en Ginebra, en el que alertó acerca del hecho de que los recientes brotes epidémicos de ébola, en el continente africano, y de zika, en América Latina, han confirmado que las enfermedades infecciosas no son fenómenos aislados.

«Estas enfermedades pueden potencialmente afectar al mundo entero y siempre habrán nuevas sorpresas de amenazas sanitarias de cualquier tipo que podrán paralizar al mundo, ya sea con el miedo o con limitaciones de movimiento», afirmó la dirigente de la agencia sanitaria de la ONU.

«Recientemente, la epidemia de zika nos alertó acerca de la posibilidad de que una enfermedad antigua, que ha estado presente en África durante más de sesenta años, pudiera resurgir en otro continente y causar una situación de emergencia sanitaria de alcance mundial», señaló Chan.

Nuevos desafíos

Para enfrentar estos desafíos la OMS creó, este año, un servicio consagrado exclusivamente a las emergencias sanitarias provocadas por virus, como el zika o el ébola, problemas medio ambientales, resistencia a los antibióticos, calidad de los productos farmaceúticos o aumento de casos de enfermedades no transmisibles.

Este nuevo departamento de emergencias estará dotado de una dirección, de un presupuesto -unos 298 millones de euros- y de un conjunto de indicadores que permitirán poner en marcha una respuesta adecuada a las amenazas sanitarias internacionales. Los primeros informes se presentarán a principios del año próximo.

Durante su alocución, la directora de la OMS recordó los éxitos conseguidos en las últimas décadas en materia de salud, como son la reducción de la mortalidad infantil o materna, esta última ha disminuido en un 44%, o los de la lucha contra la tuberculosis, un 85% de los casos se curan actualmente.