PATRIMONIO

Las obras del convento de Madre de Dios en Sevilla comenzarán tras la Semana Santa y durarán seis meses

Este lunes se ha firmado el convenio por el cual se destinarán 237.000 euros a la consolidación de la iglesia, que lleva cerrada cuatro años

Este lunes se ha firmado el convenio para las obras urgentes en la iglesia de Madre de Dios M. J. LÓPEZ OLMEDO

Javier Macías

El convento de Madre de Dios ve la luz al final del túnel, al menos su iglesia, al menos para lo más urgente: su reapertura. Esta joya del XVI, con decoración del Barroco pleno, y donde se hallan enterradas la esposa y la hija de Hernán Cortés y tres bisnietas de Cristóbal Colón, lleva cuatro años cerrada. Demasiado tiempo para un templo de inmenso valor artístico, histórico y devocional. Este lunes se ha firmado el convenio por el cual se destinarán 237.000 euros para las obras de urgencia , 100.000 de los cuales los aportará el Ayuntamiento y, el resto, con la ayuda de la World Monuments Fund y el Patronato de la Vivienda.

El alcalde, Juan Espadas ; el delegado de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz ; el presidente de la comisión permanente del Patronato, Miguel Bermudo ; y las responsables del monasterio, Sor Patricia y Sor Adela , han ratificado este protocolo de forma que, pasada la Semana Santa, puedan iniciarse los trabajos de consolidación de la armadura del presbisterio, entre otras actuaciones necesarias para que la iglesia pueda reabrir al culto.

El arquitecto, Ángel Candela , ha señalado que «a final de enero» estará terminado el proyecto de ejecución y que, a partir de entonces, se licitarán las obras, que ya cuentan con todos los permisos de Patrimonio. «El comienzo razonable sería después de Semana Santa , ya que hay que poner andamios y por aquí pasan cofradías. El plazo de ejecución será de unos seis meses», ha apuntado.

Candela ha explicado que el templo tiene «bastantes singularidades» , la primera de ellas su tamaño: «18 metros de altura, aquí cabría un edificio de seis plantas». También, ha destacado el pavimento, que es «un elemento a preservar, de los pocos que quedan originales, que habría que tratar en siguientes fases de la restauración». Respecto a los daños que presenta la iglesia, ha informado que «uno de ellos es el desplome del muro de la nave que da a la calle San José, que se está controlando con un sistema de alta precisión» y que no requiere, de momento, de una actuación urgente.

El alcalde con las monjas de Madre de Dios M. J. LÓPEZ OLMEDO

Solución urgente

Donde sí se requerirá una solución urgente es en la armadura original del presbiterio , una cúpula de madera original de 1564, que presenta pudrición de los elementos portantes, así como empujes en el arco toral, que causó desprendimientos. Con estos 237.000 euros, se intervendrá en esta armadura, además de en el apuntalamiento de las zonas del coro bajo , donde hay vigas fracturadas.

Para afrontar estos trabajos, gracias a la coordinación del Patronato de la Vivienda se ha logrado el patrocinio de la fundación americana y del Consistorio. Bermudo ha indicado que «aún quedan seis o siete conventos en similares características» y que «ojalá haya más iniciativas público-privadas» para darles solución.

«Gracias a Dios»

Por su parte, Sor Adela, muy emocionada por ver por fin cercana el fin a los problemas por los que han visto cercenada siu vida monástica, ha afirmado que «en medio de la oscuridad, Dios pone una luz, y lo ha hecho en pleno tiempo de Adviento, de esperanza». Y se ha referido directamente al alcalde: «Dios se ha valido de usted», agradeciéndole su empeño por solucionar el problema ya que es el primer alcalde de la ciudad que ha entrado en el convento, como le comentó la priora antes de la firma.

«Es como poner una nueva piedra a esta iglesia y esto abrirá también las puertas a que otras personas o instituciones pongan recursos para financiar las futuras fases» , ha señalado Sor Adela, en relación a los futuros trabajos que necesitará el convento, no sólo en la iglesia, sino en otras dependencias que están en ruinas. «Es difícil comprender un monasterio sin iglesia» , ha dicho, antes de agradecer al propio alcalde, al arzobispo, al arquitecto, a la fundación americana, al Patronato de la Vivienda y «a tantas personas que nos han ayudado de forma anónima durantes años».

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