Abandono animal

Investigan si los 18 perros abandonados eran de un vecino del Tardón que los crió en su casa de Sevilla

Los vecinos llevaban meses denunciando los malos olores y los ruidos que salían de un bajo de la avenida Alvar Núñez

Los perros aparecieron en un parque infantil sito en la confluencia de Avenida Manuel del Valle con calle Tharsis ABC

Silvia Tubio

En una vivienda de reducidas dimensiones en la avenida Alvar Núñez , en el barrio de El Tardón, se criaron los 18 perros que fueron abandonados hace una semana en un parque infantil situado al final de la Carretera de Carmona, a varios kilómetros de distancia. Los vecinos de los dueños de los canes llevaban meses quejándose de los fuertes olores y los ruidos que salían de un bajo de apenas 60 metros cuadrados , según han confirmado a ABC algunos de los afectados.

Agentes del Seprona estuvieron hace unos días en el Tardón e indagan si los canes los trasladó el dueño directamente al parque o se los entregó a una tercera persona que finalmente fue quien se deshizo de los animales. Desde un primer momento la investigación se ha centrado en criadores más o menos profesionales porque los perros aparecieron en un recinto cerrado y donde iban a ser encontrados rápidamente. Denotaba que había interés en no poner en riesgo a los canes, que son un cruce de dos razas potencialmente peligrosas: el American Stafford y el Presa Canario .

Algunos vecinos que convivieron con más de 20 perros hacinados en el bajo relatan cómo la situación se volvió insostenible en verano, cuando las altas temperaturas agudizaron los problemas de malos olores. La mayoría de los animales que fueron abandonados son cachorros y estos apenas salían a la calle. Los dueños, un matrimonio que reside en el barrio hace años, sí sacaban a pasear a los adultos. «Una vez, se les escaparon al abrirle la puerta al cartero y no veas la que liaron», relata la dueña de un comercio muy próximo al portal.

Hace tres meses, detalla otro vecino, la comunidad de propietarios de la finca donde se ubica la vivienda acordó lanzarle un ultimatum al dueño de los perros para que se deshiciera de ellos y formularon una denuncia ante el Ayuntamiento de Sevilla . A las semanas se producía el abandono de los animales en un parque. Los perros fueron en un primer momento a la perrera municipal pero varias asociaciones protectoras pidieron hacerse cargo de ellos ya que denuncian que el zoosanitario municipal no reúne las condiciones óptima para los animales.

Hasta hace unos días había un cartel en la ventana de la vivienda investigada donde se indicaba que se cedían perros de raza. Si bien este periódico constató que ya se ha retirado. Fuentes municipales confirman que la investigación aún no está cerrada sobre unos hechos que el delegado de Seguridad, Juan Carlos Cabrera, recordó que no había «precedentes».

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