Farmacia del Aire: dosis justas y cero beneficio económico
Situada en Tablada en un centro en el que hay un laboratorio para analíticas a militares, dispensa medicamentos de la vida civil pero también específicos de las Fuerzas Armadas
La farmacia militar que hay en las instalaciones de Tablada no es una botica al uso como las de la población civil.
Antes de 1997 había tres oficinas en Sevilla —San Juan de Aznalfarache Avenida Carlos V y otra en los bloques cercanos a Tablada— pero a partir de ese año se unificaron en un solo establecimiento denominado Centro de Farmacia del Aire de Sevilla (Cefarse) , dentro de las instalaciones de Tablada, pasados los controles, en unas dependencias amplias y luminosas. Su prioridad, la atención a los miembros de las Fuerzas Armadas .
El acceso principal es una sala amplia presidida por el mostrador para despachar al público, que son los militares y sus beneficiarios y que pagan menos porque no existe el margen comercial de las farmacias civiles.
En esa sala hay vitrinas que albergan, como una especie de museo, objetos antiguos de la botica militar que evocan otros tiempos y le imprimen personalidad.
Por otra puerta diferente a la de esta entrada se llega a la rebotica, espacio al que suceden estancias administrativas y, seguidamente, el laboratorio, donde se hacen analíticas de droga, agua y oxígeno.
Fórmulas magistrales
Ésta es una de las grandes diferencias que tiene esta farmacia respecto a las civiles, además de que no puede hacer fórmulas magistrales, de que dispensa medicamentos específicos de las Fuerzas Armadas y de que no tiene afán de lucro, es decir, no busca beneficio económico —por eso los envases son más simples y austeros ya que la producción está sujeta a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y todo lo que se recauda se entrega a Hacienda.
La teniente coronel farmacéutico Ángeles Diego Martín , jefe de este centro desde 2016, recibió a ABC y explicó algunos de los pormenores que hacen a esta farmacia diferente.
Este centro no tiene liquidez para poder adquirir cualquier tipo de medicamento como una farmacia civil porque está supeditado a los Presupuestos y su prioridad siempre es la atención a los miembros de las Fuerzas Armadas. Tampoco puede hacer fórmulas magistrales y así, dependiendo del presupuesto y de las prioridades que se establezcan, hace sus peticiones a los centros de Colmenar Viejo, Burgos y Córdoba que es donde están los laboratorios.
Los laboratorios de las Fuerzas Armadas son estatales, son los que fabrican los medicamentos huérfanos «en momentos de necesidad como sucedió con el caso de la gripe A que hubo hace años cuando hizo las reservas de las vacunas, y el que se encargó de gestionar esa crisis nacional».
«Aquí tenemos algunas cosas —dice la teniente coronel— que son iguales a las que hay en la vida civil como el ibuprofeno, la aspirina, los antibioticos, el metamizol, el paracetamol pero las dosis son menores porque buscamos el efecto que tiene que hacer, pero con la dosis justa. En la calle te puedes encontrar paracetamol de 1 gramo y nosotros solo lo tenemos de 500 miligramos. O ibuprofeno de 600 y nosotros lo tenemos de 400. Y eso es así porque el efecto se consigue con esas dosis y elevarlo supone un mayor gasto de producción».
Sin embargo, sí hay medicamentos que son específicos de las Fuerzas Armadas. «Son —sigue— antigripales, o vitamina A+D que es una crema cicatrizante. Los antigripales podrian equipararse al Frenadol pero es una formulación específica desarrollada en las Fuerzas Armadas cuando entonces en la vida civil no existía nada parecido. La vitamina A+D es el equivalente al Halibut o cremas emolientes para la suavidad de la piel. También en su día se formuló porque sus características no existen en el mercado civil. Exactamente igual, no. La composición de los bucofaríngeos también es distinta. En fin, son pocas las cosas que hay con composición propia».
Los que sí es diferente en este centro, como decíamos, es la existencia de un laboratorio, junto a la atención al público.
Drogas de abuso
En el laboratorio se hacen análisis de drogas de abuso, siguiendo las directrices marcadas en el Plan Antidroga del Ejército del Aire bajo el principio de «tolerancia cero» y «su efecto disuasorio ha hecho posible que en los últimos años disminuya mucho el consumo». Además, se analiza el oxígeno de vuelo de las bases aéreas de Morón y Talavera, en cumplimiento de los requerimientos recogidos en la normativa de la OTAN . Por último, están los análisis de aguas de consumo y recreativas.
Las características especiales de los suministros en las Fuerzas Armadas, relacionadas con su inherente movilidad, con instalaciones repartidas por toda la geografía nacional, ubicadas en núcleos urbanos o en bases y destacamentos alejados de las ciudades, donde el agua de consumo humano puede proceder de abastecimientos municipales, propios o mixtos, y el uso cada vez más frecuente de aljibes y cisternas, hacen necesario establecer un programa específico de la vigilancia sanitaria de las aguas de consumo humano.
Todo lo descrito es el Centro de Farmacia del Aire de Sevilla en el que también hay seguimiento y control del servicio de óptica a través de una concesión administrativa e inspecciones sanitarias de legionella.
Presta servicio a escuadrones y centros del Ejército del Aire, hasta un total de catorce; a la Unidad Militar de Emergencias de Morón y a la Guardia Civil.
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