TURISMO

Cosméticos, el souvenir que se lleva el turista coreano de Sevilla

Los visitantes de este país compran masivamente cremas solares e hidratantes en las farmacias

Un grupo de turistas orientales cerca del Alcázar JESÚS SPÍNOLA

Elena Martos

La imagen de varios grupos de orientales saliendo de la farmacia de la plaza de la Alfalfa un martes cualquiera ya ha dejado de extrañar a los vecinos, que vienen notando ese tránsito desde hace algo más de un año. Llegan de dos en dos, a veces de cuatro en cuatro y salen con bolsas repletas de botes y cajas. La estampa se repite en las botica de la Puerta de Jerez y en la del Arenal, que frecuentan tanto como la tienda de recuerdos. ¿Qué compran? Por lo visto, cantidades industriales de cremas solares e hidratantes y todo tipo de cosmética europea que encuentran a buen precio y que debe estar de moda. En su mayoría son clientes coreanos que llegan a través de touroperadores en rutas por España. Desde hace algún tiempo Sevilla está incluida en estos circuitos, junto a Madrid, Barcelona y la Costa del Sol, como indican a ABC profesionales de estas céntricas boticas.

La demanda ha ido en aumento y beneficia a buena parte del sector del Casco Histórico de la ciudad, especialmente a las más cercanas al conjunto monumental. La farmacia de la Alfalfa llegó incluso a contratar a una auxiliar con dominio del inglés y el coreano que atendía a estos clientes. Fue sólo durante un periodo corto para una sustitución, pero logró convertir al establecimiento en una referencia para estos visitantes. « No hay ningún producto concreto que les fascinen , compran sobre todo cremas solares e hidratantes de marcas europeas», explica una de las farmacéuticas de este establecimiento, pero sí hacen una caja generosa.

Lo mismo ocurre con la de la avenida de la Constitución, donde la presencia de clientes asiáticos ha dejado de ser una anécdota. «Al principio decíamos que eran chinos, pero no sabemos realmente su nacionalidad. Hablan poco inglés y piden los productos de una manera muy concreta . Al final terminamos entendiéndonos», indica una empleada de este establecimiento. Otra de las fórmulas para comunicarse es utilizar el traductor del móvil para pedir lo que desean. La afluencia ha sorprendido a los trabajadores de las farmacias, que lo atribuyen mucho más a una moda pasajera que a una tendencia. Pero si continúa, no descartan incluir carteles o algún tipo de indicaciones en coreano.

El coreano es el duocécimo mercado de Sevilla JESÚS SPÍNOLA

Entre los 20 primeros

Los datos indican que merece la pena mimar a este visitante. Sólo en 2017 llegaron a Sevilla un total de 29.027 viajeros de esa nacionalidad , que contrataron 43.130 noches en hoteles de la ciudad, según los datos del Consorcio de Turismo. Son también amantes de la gastronomía sevillana y otra de las paradas habituales en la visita es el restaurante La Brunilda , situado en el Arenal. Tampoco extraña ya a los que pasan a menudo por su puerta la cola de asiáticos que se forma antes de la una de la tarde para coger mesa. Dado su reducido espacio, el establecimiento no hace reservas, pero sí ha tenido un detalle con este tipo de público, una iniciativa que partió de los propios camareros aprendiendo a saludar o a preguntar en coreano a estos comensales . Lo comenta Ana, una de las empleadas, que es capaz de recitar en este idioma buena parte de la carta. Cree que «el boca a boca ha funcionado bien» y eso los ha convertido en un restaurante de referencia.

La pasión de una clienta habitual por La Azotea fue el motivo de que este negocio sea también otra de las referencias para el turista procedente de Corea del Sur. Cuenta a ABC uno de los empleados que se trata de una guía turística que ya no vive en Sevilla, pero que recomendó el lugar a decenas de compatriotas que lo han compartido con sus conocidos. Asegura que les encanta el jamón, pero también el pulpo y cualquier plato que lleve arroz.

El negocio de la calle Mateos Gago es el más frecuentado al encontrarse en el circuito turístico habitual. Allí cuentan ya con una carta traducida al coreano, aunque también empiezan a ser habituales en el local de la calle Zaragoza. El pulpo a la gallega tampoco falta en las comandas que hacen en El Baratillo , en la calle Adriano. Es otro de los lugares con indicaciones en esa lengua, una decisión que tomaron cuando comenzaron a ver la afluencia. Señalan desde este establecimiento que son muy educados y que se comunican a través del traductor del móvil.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación