Violencia machista

Carpetazo a la denuncia por malos tratos contra un policía de Sevilla que lucha contra la violencia machista

La Audiencia reprende el «intento a toda costa» de la denunciante de mantener sin pruebas la instrucción contra su exmarido

Fachada de los Juzgados de Sevilla Manuel Gómez

Silvia Tubio

Un policía de Sevilla que investiga a maltratadores denunciado por su expareja, quien le acusa de violencia machista . El titular estaba servido y daba para condenar antes incluso de que la justicia se pronunciara. En ese cadalso mediático se vio sentado el año pasado un miembro de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional de Sevilla cuando trascendió la denuncia que le había presentado su exmujer, con la que tiene dos hijos de muy corta edad. La denuncia fue archivada por el juzgado de Violencia de Género 2 de Sevilla. Un carpetazo que ha sido confirmado de manera definitiva por la Audiencia Provincial hace unas semanas.

En un contundente auto dictado por la Sección Cuarta , el tribunal confirma la decisión que había acordado en marzo el juzgado especializado en violencia machista, cuya titular se apoyó en el informe de la fiscal que también solicitaba el sobreseimiento de la causa por la falta de pruebas. El tribunal reprende a la denunciante por querer continuar con el procedimiento , elevando la causa a la Audiencia, «en un intento casi extremo de mantener viva a toda costa la causa penal».

La pareja inició su relación en abril de 2015. En octubre del año siguiente contrajeron matrimonio. En abril de 2018, el denunciante y agente de Policía le comunicó a su pareja la intención de divorciarse y de solicitar la custodia compartida de sus hijos. Tres meses después, ella lo denunció por malos tratos. Para la Fiscalía , esa denuncia estaba movida por «motivos espurios» , ya que la denuncia cerraba la puerta al padre para obtener la custodia de los pequeños.

No todo es maltrato

«Ciertamente no toda relación conflictiva de pareja que desemboca en una ruptura tiene por qué presuponer la comisión de ilícitos penales». En su informe, el Ministerio Público cita una sentencia de la Audiencia para subrayar que no hay indicadores de que se hubiera producido violencia física o habitual y se inclina más por un deterioro significativo del matrimonio con faltas de respeto por ambas partes.

La denunciante aportó varios partes de lesiones, pero la Audiencia advierte que estos no corresponden a los días en los que afirma que ocurrieron agresiones ni tampoco recoge estigmas lesivos. «Tan sólo hablan de ansiedad o de patologías asociadas al embarazo». Igual de contundente se expresa el tribunal para afirmar que no hay «el mínimo atisbo» de que el denunciante ejerciera un control enfermizo sobre su expareja.

La denuncia a un funcionario que atiende a diario a mujeres víctimas de la violencia machista causó una gran sorpresa. Detrás de la filtración pudo haber ina venganza sindical

En la denuncia tampoco se incorporaron testimonios, salvo el de la madre de ella, que corroboren algunas de las presuntas agresiones. Algunos amigos de la pareja confirmaron cómo ella les pidió que medieran para que su marido no se divorciara o cómo en cierta ocasión, tras una pelea de la pareja, vieron en el rostro de él signos visibles de que había sido golpeado. El relato que presentaron estos testigos fue muy desfavorable para la presunta víctima. Una de sus mejores amigas declaró cómo ella le había confesado que había engañado a su pareja con un falso embarazo para empujarlo a contraer matrimonio.

El tribunal no acuerda deducir testimonio contra la mujer por denuncia falsa porque entiende que la denunciante «reinterpretó» la relación que había tenido con su exmarido en clave de maltrato una vez se rompió el matrimonio.

La denuncia contra un policía que está destinado a atender a mujeres víctimas de violencia machista causó una gran sorpresa en el seno de la jefatura superior de Policía donde tiene la UFAM su base. El agente, antes de que se presentara formalmente la acción judicial contra su persona, alertó a sus superiores de que estaba en trámites de separación y que probablemente fuera denunciado por su exmujer. Voluntariamente entregó su arma reglamentaria en depósito. La filtración de esa denuncia, según fuentes consultadas por ABC, pudo deberse a una suerte de venganza sindical . En la Policía Nacional se vive una lucha encarnizada por el auge de Jupol en detrimento de otros sindicatos.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación