Edificio de Vilima, situado en la confluencia de las calles Lagar y Buiza y Mensaque
Edificio de Vilima, situado en la confluencia de las calles Lagar y Buiza y Mensaque - ABC
URBANISMO

La cadena hotelera H10 compra el edificio de Vilima en la calle Puente y Pellón

El inmueble, con 5.517 metros cuadrados, tiene dos sótanos, una planta baja, tres plantas superiores y un ático

Los compradores pretenden abrir en los antiguos almacenes un nuevo establecimiento hotelero en 2019

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Los herederos de José Lirola Cerezuela han firmado este viernes ante notario la venta por más de 6 millones de euros del edificio de Almacenes Vilima, que albergó hasta 2001 lo que algunos consideran que fue el primer centro comercial netamente sevillano, situado en la confluencia de las calles Lagar y Buiza y Mensaque, en la zona de Puente y Pellón Ha adquirido este inmueble el grupo catalán H10 Hotels para acoger uno de sus establecimientos, que abrirá sus puertas en 2019, según fuentes consultadas por ABC. En la actualidad, la citada cadena hotelera cuenta con 21 hoteles en España, Cuba, República Dominicana y México. En Sevilla H10 Hotels explota el hotel boutique Corregidor, de 76 habitaciones, en la calle Morgado, esquina con Amor de dios.

Antes de la firma de la operación de compraventa del edificio, la propiedad pidió información al Ayuntamiento de Sevilla para saber si podía restaurar el inmueble para destinarlo a hotel de cuatro estrellas. La Comisión Local de Patrimonio dio el visto bueno, aunque con salvedades sobre la obra de reforma propuesta en Almacenes Vilima, levantados en una antigua casa del siglo XIX y que dispone de 5.517 metros cuadrados construidos sobre una parcela de mil metros cuadrados. El inmueble dispone de dos plantas sótano, un bajo, tres plantas sobre rasante y un ático.

La normativa exige la protección de varios elementos del inmueble, entre ellos la disposición del zaguán, la portada de la fachada de la planta baja, así como las fachadas de primera y segunda planta, la primera crujía, la escalera de servicio, las cubiertas, el patio y galerías.

Pero lo más destacable es que el edificio, cerrado desde 2001, está en una parcela de usos terciarios del denominado Conjunto Histórico, donde la nueva normativa lo ha dejado fuera de ordenación por varios motivos, entre otras cosas por tener una altura de cuatro plantas más ático, cuando la máxima permitida es de tres plantas más ático. El tener más plantas de lo que ahora permite la normativa hace que el edificio casi duplique la edificabilidad máxima permitida, razón por lo que se propone al Ayuntamiento demoler parcialmente el inmueble, más exactamente casi todo el ático.

El Ayuntamiento ve admisible un hotel en un edificio cuya parcela tiene usos terciarios, pero encuentra difícil encajar la posibilidad de que haya superficies que puedan usarse de forma colectiva sobre la tercera planta mediante la construcción de una escalera, con lo que se esfuma la posibilidad de que el establecimiento pueda contar con una terraza-bar.

En 2009 los propietarios del inmueble llegaron a firmar un contrato de alquiler a largo plazo con la cadena High Tech, que anunció su intención de invertir unos 6 millones de euros para reformar el edificio y convertirlo en un establecimiento de cuatro estrellas. El Plan Centro, que cerró el Casco Histórico al tráfico rodado durante el Gobierno de Alfredo Sánchez Monteseirín y el rechazo del Ayuntamiento construyera un aparcamiento subterráneo, dieron al traste con el proyecto.

A preguntas de ABC, la asociación de comerciantes Alcentro, presidida por Enrique Arias, ha señalado que el nuevo hotel de H10 Hotels y los apartamentos turísticos que construye Singular Apartaments en la calle Puente y Pellón dinamizarán aún más una zona que ha logrado superar el declive de las últimas décadas. «De hecho, actualmente el índice de ocupación de locales comerciales en la calle Puente y Pellón es del 100% tras la venta de Vilima», ha indicado Arias, quien en 2008 criticó duramente al Gobierno socialista municipal por no permitir la entrada al garaje del citado edificio, cuando sí se estaba autorizando en la calle San Eloy o San Fernando durante la aplicación del Plan Centro. «Los dos últimos edificios que quedan por dar uso en la zona son el de la antigua sede de la Agencia Municipal Tributaria y el que acogió la comisaría de Policía de la Gavidia, ambos de propiedad municipal», ha añadido Arias.

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