Barceló presenta un proyecto para la Gavidia que incluye la reapertura de San Hermenegildo

El uso que se dará a la antigua comisaría de la Gavidia está cada vez más cerca de resolverse, pero todo dependerá del «concurso de ideas» que el gobierno socialista convocará a partir del 1 de septiembre. Este es el principal acuerdo alcanzado entre Juan Espadas y los portavoces de los demás partidos políticos municipales, que formarán parte, junto con varios expertos, de la mesa que decidirá el proyecto más interesante para la ciudad. Antes de todo eso, el alcalde tiene que solicitar al Ministerio del Interior que elimine la carga que actualmente soporta el inmueble, correspondiente al solar de la comisaría de Nervión incluido en el acuerdo de transacción entre el Estado y el Ayuntamiento, que está tasado en 600.000 euros.

Una permuta de terrenos o el pago en metálico de esta cantidad eliminará el único escollo que queda para que la administración local tenga la plena titularidad del inmueble y pueda licitar el proyecto escogido.

Hasta ahora, Urbanismo cuenta con cuatro propuestas sobre su mesa, pero ninguna de ellas está impulsada por el propio Ayuntamiento. Se trata de proyectos planteados por empresas privadas que tendrán que presentarse a la convocatoria de septiembre para ser estimadas. Los requisitos para participar en este «concurso» serán fundamentalmente dos: que tenga financiación privada y que respete los usos públicos a los que no va a renunciar el Ayuntamiento, obligado a volver a recalificar el edificio después de que durante el mandato de Juan Ignacio Zoido se le diera la calificación de suelo para gran superficie minorista. La mayoría de los partidos políticos con representación en la actual Corporación apuesta por proyectos que combinen la explotación privada con los equipamientos públicos, por lo que el acuerdo adoptado es que cuando se decida cuál es el más idóneo, se recalificará de nuevo para adaptarlo a los usos elegidos. El propio alcalde lo confirmó ayer: «Se trataría de una recalificación menor y dependerá de la opción que se escoja de entre todas las que se presenten, ya que no hay ninguna que tenga prioridad sobre otra».

Los cuatro proyectos presentados hasta ahora en Urbanismo son uno de la empresa Forus para hacer un gimnasio, otro para un hotel de Grupo Mandarín, un tercero que consiste en convertir la antigua comisaría en un espacio de coworking para el desarrollo de nuevas empresas —este último viene avalado por Ciudadanos— y otro de la cadena hotelera Barceló que, según las fuentes del gobierno consultadas por este periódico, es por ahora el más atractivo a criterio de quienes tienen que tomar la decisión. Barceló ya hizo una oferta al anterior gobierno del PP que nunca prosperó. Y ahora mantiene la propuesta con un añadido que es visto con buenos ojos por el gobierno: además de construir el hotel en la vieja comisaría, rehabilitaría la iglesia del antiguo Convento de San Hermenegildo, en la Plaza de la Concordia, un edificio desacralizado de titularidad municipal que está en desuso desde finales de los noventa, cuando dejó de ser una sala de exposiciones del Ayuntamiento.

La propuesta de Barceló incluye rehabilitar este Bien de Interés Cultural, volver a abrirlo como sala de exposiciones y hacerse cargo de los costes de mantenimiento. Fuentes de la cadena hotelera confirmaron ayer a ABC el proyecto y aseguraron que su intención es presentarse a la convocatoria planteada por el Ayuntamiento. Este plan gusta mucho al gobierno municipal, ya que desbloquearía dos inmuebles actualmente inutilizados y revitalizaría esa zona céntrica de la ciudad al completo. Además, los usos planteados por Barceló entran dentro de las posibilidades de recalificación que baraja el PSOE, que descarta ya de forma rotunda los actuales usos. El propio Espadas también lo confirmó ayer: «El secretario municipal informó en la reunión con los portavoces de que el proceso de calificación como gran superficie minorista que inició Juan Ignacio Zoido se culminó, aunque no se ha publicado todavía, pero a todos los efectos la Gavidia tiene ese uso aprobado. Sin embargo, la mayoría de los miembros de la actual Corporación prefiere que se mantenga una parte para uso público, por lo que será necesario recalificar de nuevo, pero eso sólo se hará cuando se haya elegido el proyecto».

El alcalde aclara que su gobierno no ha negociado con nadie, sino que ha recibido distintas propuestas, algunas de las cuales no tienen financiación privada, por lo que no pasarán la criba en el concurso. A partir del 1 de septiembre, las empresas que hasta ahora se han interesado tendrán que presentarse a esta convocatoria pública y conseguir un quórum suficiente por parte de los partidos con representación en el Pleno. Por ahora, Ciudadanos prefiere el centro de coworking, el PP apuesta sobre todo por el gimnasio y el gobierno valora la idea de Barceló para rescatar también San Hermenegildo, un edificio de gran valor histórico y patrimonial que fue sede del Parlamento de Andalucía y que lleva con el cerrojo echado más de tres lustros.