Rafael Salado, en el despacho de sus bodegas de Umbrete
Rafael Salado, en el despacho de sus bodegas de Umbrete - D.C.
UMBRETE

El vino espumoso Umbretum abre mercado en el Reino Unido y mira hacia Estados Unidos

Lo produce Bodegas Salado, una empresa familiar de Umbrete que va ya por la quinta generación. Su vino dulce Abuelo Rafael se vende con éxito en Holanda

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El Aljarafe ha sido conocido desde antaño por sus vinos y hoy se mantiene en él una de las bodegas con más prestigio e historia de la provincia: las Bodegas Salado. Fundadas por Ramón Salado y con más de dos siglos a sus espaldas, se encuentran dirigidas por la quinta generación, capitaneada por Rafael y Santiago Salado. «En este negocio cada generación ha ido aportando a la bodega un plus, que ha hecho posible que Bodegas Salado haya conseguido llegar donde está ahora mismo», cuenta Rafael.

Rafael Salado Lucena era el abuelo de los actuales propietarios y trabajaba como representante de la casa Sandeman, de Jerez de la Frontera, para el Aljarafe. Por aquel entonces, compraba toda la producción, lo que supuso un gran empuje para Salado.

Cada año se aportaba a Sandeman 1.500 botas de 500 litros cada una de mistela procedentes de la comarca sevillana.

Hasta finales de los 70

Pero esto sólo duró hasta finales de los 70, ya que en esa época es cuando Jerez crea el Consejo Regulador del Marco de Jerez, que prohíbe la entrada de vinos que no fueran de la zona, lo que supuso que en el Aljarafe muchas personas arrancaran sus viñas. «Nosotros decidimos seguir hacia adelante con el negocio y fue cuando mi abuelo junto con sus dos hijos, Francisco y Pedro Salado, empezaron a buscar bares y restaurantes para poder vender su producción.

También coincidió que en esa época mi padre era alcalde de Umbrete y decidió crear el día del Mosto de Umbrete, que desde entonces se viene celebrando, y que este año tendrá lugar el 21 de febrero», cuenta Rafael Salado a ABC Provincia.

El día del Mosto fue una manera de poner de moda el mosto y de llevar a cabo una excelente campaña de difusión, mediante una degustación gratuita para todo el mundo que quisiera acercarse hasta la localidad aljarafeña. De hecho, «se ha vinculado tanto el mosto con el pueblo, que ahora nadie entiende Umbrete sin el mosto, ni el mosto sin Umbrete», asegura Salado.

A raíz de esto, Bodegas Salado comenzó a tener como clientes a numerosas bodegas que querían que su mosto se fermentase se en sus establecimientos: «Por esa razón nosotros les llevábamos la bota, es decir, el zumo de uva recién pisado para que una vez fermentado en sus bodegas, después lo vendiese», cuenta Rafael Salado.

En torno al año 2005, Salado comenzó a innovar con nuevos vinos. «Sacamos el primer espumoso Umbretum, elaborado con uva del Aljarafe. Asimismo, presentamos el primer tinto del Aljarafe –cosecha y crianza-, el vino de naranja, el vermut y hasta un total de 15 referencias de vino, además de vinagre. De hecho, nuestro vinagre fue galardonado con la Medalla de Plata en el I Encuentro Internacional «Vinavin» celebrado en la localidad cordobesa de Montilla», cuenta el empresario a ABC Provincia.

Gracias a Prodetur y a Extenda han podido empezar a exportar su producto. «Actualmente estamos llevando nuestro espumoso Umbretum a Reino Unido, y los vinos dulces como El Abuelo Rafael –similar al Pedro Ximenez-, a Holanda. Ahora tenemos puestas las miras en EEUU, aunque por el momento la exportación representa una pequeña parte de nuestra producción», cuenta Salado.

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