El PP denuncia que se han producido desperfectos estructurales que afectan al exterior del edificio
El PP denuncia que se han producido desperfectos estructurales que afectan al exterior del edificio - A. H.
LEBRIJA

El PP denuncia goteras y deficiencias estructurales en el nuevo pabellón cubierto de Lebrija

La instalación deportiva ha sido puesta como ejemplo de lo que no se debe hacer durante un pleno del Ayuntamiento de Marchena

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Los problemas en torno al nuevo pabellón cubierto de Lebrija, inaugurado el 19 de septiembre de 2015, no han acabado. A poco menos de dos año de su apertura, que se vio retrasada en más de tres años y medio desde el inicio de la obra, el grupo municipal del PP ha denunciado que se producen filtraciones de agua de lluvia a causa de las goteras existentes en la cubierta y que hay un problema de condensación que hace que el vapor acabe convirtiéndose en agua y cayendo sobre el pavimento de la instalación deportiva.

Los populares también han constatado que se han producido desperfectos estructurales externos visibles en las juntas del edificio, que están comenzando a abrirse.

Además, las ventanas no cuentan con un sistema de apertura y no disponen de cortinas o persianas, lo que provoca que la luz del sol acabe deslumbrando a jugadores y árbitros durante los encuentros que se disputan en horario diurno.

Se da la circunstancia de que el nuevo pabellón se construyó para dar respuesta a las deficiencias que presentaba el antiguo, con el que integra junto a otras instalaciones el complejo deportivo Ciudad de Lebrija. El deterioro de la instalación deportiva ha sobrepasado las fronteras locales y, según el portavoz municipal del PP, Francisco Javier Monge, «está haciendo que Lebrija sea la comidilla, o el ejemplo de lo que no se debe hacer, en el resto de la provincia».

Monge se refiere a la mención que realizó la delegada municipal de Patrimonio, Medio Ambiente y Obras Municipales de Marchena, Beatriz Sánchez (PSOE), en el Pleno de su Ayuntamiento celebrado el pasado 31 de marzo. Durante el debate sobre la construcción de un pabellón deportivo para su ciudad, Sánchez dijo que estaban «buscando distintas soluciones que no den problemas» e indicó que «Lebrija hace un año que ha construido un pabellón cubierto y se llueve».

Ante esta situación, el concejal del PP lebrijano Cristóbal Romero ha manifestado que «si el equipo de gobierno (PSOE) no puede realizar grandes obras, que se dedique a mantener lo que tiene de forma puntera; y si puede hacerlas, que las haga bien».

El nuevo pabellón cubierto fue inaugurado por el consejero de Deporte de la Junta de Andalucía, Javier Fernández, en un acto que contó con la presencia de los representantes políticos locales y del mundo deportivo lebrijano y en el que se señaló que se trataba de una instalación moderna que responde a la tipología III de pabellón que recoge el catálogo de la Consejería que diferencia entre la sala polideportivo y la zona de espacios de apoyo.

La parcela del pabellón ocupa una superficie de 63.456 metros cuadrados. La sala polideportiva contiene la pista principal de 30 por 40 metros y tres trasversales para entrenamiento; almacén; gradas fijas para 266 espectadores sentados a la que se puede sumar una telescópica para 100 más; y aseos públicos. La zona de apoyo incluye oficinas, vestuarios para árbitros y técnicos, enfermería, seis vestuarios para deportistas, sala de gimnasia, locales de servicios y pasillos de circulación separados para calzado de calle y calzado deportivo.

Los clubes Baloncesto Tartessos, Balonmano Lebrija, Lebrija Fútbol Sala, Club Gimnasia Rítmica, Mantenimiento Popeye, Batuka Lebrija, Multideportes Lebrija y Nabrissa Baloncesto comparten las instalaciones del nuevo pabellón con los usuarios particulares en las diferentes disciplinas deportivas que también incluyen taekwondo, voleibol, tenis de mesa y psicomotricidad.

Los problemas relacionados con el nuevo pabellón se remontan a poco después del inicio de las obras. El 6 de julio de 2011 los servicios técnicos municipales, tras una visita a las obras, detectan la ausencia de actividad. Poco más tarde se confirma: la empresa adjudicataria de las obras, Consyproan SL, había sido declarada en concurso de acreedores. Las obras estaban paradas.

En ese momento, la ejecución del proyecto se encontraba al 63,57 por ciento, según la última certificación de obra firmada el 5 de julio de 2015. Empresa adjudicataria y ayuntamiento se embarcaron en negociaciones para llegar a un acuerdo que permitiera el final de los trabajos, pero no se llegó a buen puerto. El 16 de julio de 2014, el ayuntamiento acuerda la resolución definitiva del contrato de obra suscrito en su día.

Después de más de tres años y medio de paralización, la Administración municipal retoma las obras y el 24 de febrero de 2015 adjudica la finalización de los trabajos a la empresa Alvac SL.

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