CÁDIZ

Profundo dolor en la Policía Nacional de Cádiz por la pérdida de Paquito: «Tu ejemplo de lucha nos acompañará en cada patrulla»

La Comisaría gaditana vive con un devastador pesar el fallecimiento de Paco Rivero, el agente que quiso seguir trabajando con ellos hasta el final a pesar de sufrir una grave enfermedad

Sus compañeros destacan su entrega y su amor por la Policía que jamás dejó de lado

Paco, el policía de Cádiz que tras superar una leucemia ha vuelto a la comisaría: «Mi ángel custodio ha sido mi hermana»

El policía Paco Rivero, durante su discurso por el Día de la Policía el pasado año. a. vázquez
María Almagro

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Hace unos años cuando se juzgó en Cádiz a cuatro policías por un caso por el que se sentenció sin ninguna duda que no tuvieron ninguna responsabilidad, Paquito acudió cada día para estar junto a ellos. Y cuando se les dio la inocencia corrió a abrazarles mientras que con los ojos llorosos les decía: «¡Por fin, por fin!». Durante varias semanas este agente de la Policía Nacional, entonces adscrito a los juzgados, estuvo acompañando a los que habían sentado en el banquillo y sufrió con ellos hasta el final. La palabra compañero se hacía visible y se sentía a su lado cuando cada mañana o cada tarde que había sesión Paco Rivero esperaba inquieto a entrar en la sala.

Entonces ya era un policía muy querido por los suyos, admirado por su intensa dedicación y con el que se podían mantener largas y profundas conversaciones, además de disfrutar de su siempre eterna sonrisa y enorme gracia natural. Estas señas se distinguían de inmediato al conocerlo.

Y así siguió. Incluso cuando recibió una de las peores noticias que pueden darte. Una leucemia mioloblástica le ponía contra las cuerdas. Pero no se rindió. Él mismo lo contaba hace un año por el Día de la Policía cuando con un coraje absoluto decidió subir al atril y explicar todo aquello que había sentido. Eran los Ángeles Custodios y su plan era rendirle así un homenaje ante todos a su hermana quien le había ayudado en el trasplante y decirle que ella había sido precisamente su ángel. Al igual que el resto de su familia.

Y es cierto. Le regalaron más tiempo. Y esperanza. Y en ese tiempo Paquito, como recuerdan sus compañeros, nunca quiso quedarse atrás. Como tampoco quiso rendirse jamás en los maratones y triatlones que corría. Así que aunque le ofrecieron la jubilación el agente Rivero volvió a la comisaría hasta que este jueves la enfermedad ya le ha obligado a marcharse. Pero ha sido a la fuerza. Paco ha fallecido siendo policía. Agente de Delincuencia Urbana.

«Con profunda tristeza comunicamos el fallecimiento de nuestro compañero y amigo Francisco Rivero, 'Paquito', tras una larga enfermedad que afrontó con la misma entereza, energía y sonrisa que siempre le caracterizaron», han comunicado con un «enorme» dolor sus compañeros. «Hasta sus últimos días quiso seguir formando parte activa de esta gran familia azul, cumpliendo su servicio con dedicación, optimismo y ese espíritu deportivo que lo definía».

«Hoy, querido Paquito, los ángeles a los que tanto mencionaste te reciben en el cielo, guiado por nuestro Santo Ángel de la Guarda, patrón de la Policía Nacional. Tu ejemplo de lucha, tu amor por esta profesión y tu sonrisa seguirán acompañándonos en cada patrulla, en cada guardia y en cada gesto de compañerismo».

«Tu familia policial nunca te olvidará».

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