Carlota Prado: la historia más negra de «GH» tiene nombre y apellidos

La concursante aseguró haber sufrido abusos sexuales durante su estancia en el reality y denuncia que el espacio no hizo nada para impedirlo

Carlota en su presentación como concursante de «GH Revolution» MEDIASET ESPAÑA

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En noviembre de 2017, Telecinco estaba emitiendo y realizando en directo «GH Revolution» , la decimoctava edición del reality más importante de la televisión española. Pero, como venía sucediendo en los últimos años, el público no estaba respondiendo como se esperaba: en el segundo año de Jorge Javier Vázquez al frente del concurso, se estaban registrando los peores datos de audiencia, algo que provocó que se convirtiera, hasta la fecha, en la última edición con anónimos emitida.

Durante dicha edición, se formó una pareja dentro de la casa. Carlota Prado y José María López eran los únicos concursantes que, ante las cámaras, comenzaron una historia de amor. La forma de ser de ambos era muy diferente: la primera se mostraba muy hermética y algo distante, mientras que el segundo era notablemente más confiado y cercano. A pesar de sus diferencias, comenzaron una relación que, a priori, parecía estar funcionando bien.

Sin embargo, algo cambió en una noche de noviembre. Como suele ser habitual en «Gran hermano» y sus posteriores versiones, el concurso organiza fiestas en el interior de la casa para que los participantes se diviertan, al tiempo que dan contenido útil para crear vídeos que emitir en sus múltiples galas semanales. En estas fiestas, además, se ofrece a los concursantes alcohol , pero en cantidades moderadas.

Una de estas fiestas, como muchas anteriores, se celebró el viernes 3 de noviembre. Y, desde ese momento, silencio. La sorpresa saltó cuando el sábado 4 de noviembre, a través de las redes sociales, la organización de «Gran hermano» emitió un comunicado explicando algo que había sucedido en el interior de la casa: «La Dirección de "Gran hermano" ha decidido expulsar del programa a José María por lo que considera una conducta intolerable . Asimismo, ha considerado oportuno que Carlota deje la casa».

Dicho comunicado, como era de esperar, sorprendió a los espectadores, pero más todavía sorprendió cuando se empezaron a filtrar los detalles de lo que había sucedido en las instalaciones de Guadalix de la Sierra: presuntamente, José María López había abusado sexualmente de Carlota Prado , cuando estaba inconsciente a consecuencia del alcohol. Tardaron semanas hasta que, finalmente, se dio por buena la versión, sobre todo cuando trascendió que la organización puso en conocimiento de la Guardia Civil lo sucedido en el programa de televisión.

Carlota Prado salió del concurso, de forma temporal, por prescripción de la organización. Durante ese tiempo, se encontró semiaislada en un hotel , recibiendo tratamiento psicológico y teniendo ocasión de hablar y ver a su madre, que se acercó hasta Madrid para estar con su hija en aquellos complicados momentos.

Mientras, el concurso seguía transcurriendo con normalidad. En ningún momento el programa le puso nombre a lo que le había sucedido a Carlota Prado, y mucho menos emitieron imagen alguna que expusiera públicamente pistas o indicios de lo que había sucedido, aunque el público ya había recibido la noticia por otros cauces.

A los pocos días, Carlota Prado decidió, después de que el espacio le ofreciera la oportunidad de abandonar, reincorporarse a la convivencia en directo. Tan solo habían pasado cinco días desde que abandonara el concurso, pero estaba segura de su decisión. Pocas horas antes de una gala en directo, Prado regresó a Guadalix de la Sierra , y el programa cortó, durante unas horas, la emisión en directo del interior de la casa.

De esta forma, Carlota podría reengancharse sin ser vista, pudiendo responder a lo sucedido ante sus compañeros, que se le hicieran las preguntas lógicas ante su situación y, después, silenciar la cuestión. Horas después, el programa volvió a emitir en directo a través del "canal 24 horas". Carlota Prado ya estaba en el interior del programa y algunos concursantes le seguían mandando mensajes de ánimo o transmitiéndole sus sentimientos ante lo sucedido. Y, desde entonces, silencio .

Fue a su salida posterior de «GH Revolution» cuando Carlota Prado decidió denunciar , con las imágenes del programa como prueba en su poder, a su presunto agresor. A día de hoy, casi dos años después de estos sucesos, no cuenta con una sentencia que la proteja, y ha decidido guardar silencio durante mucho tiempo, hasta que se han ido conociendo algunos detalles de lo que sucedió aquella noche del 3 al 4 de noviembre de 2017.

Carlota Prado tan solo ingirió cuatro chupitos , una cantidad de alcohol insuficiente como para hacerla caer inconsciente. Sin embargo, después de no haber conseguido superar la prueba semanal del programa, el presupuesto para adquirir comida y hacer la compra era muy limitado, por lo que estaban completamente famélicos, afectando también a los efectos del alcohol sobre su cuerpo.

Esto provocó que Carlota Prado cayera semiinconsciente en el sofá del salón de la casa de Guadalix de la Sierra. A su alrededor, el resto de compañeros disfrutaban de la velada al ritmo de la música. A su lado, el que era su pareja, José María López. En un momento determinado, este se acercó a Prado y, tras un comportamiento inadecuado, la llevó hasta la habitación , en donde tuvieron lugar los hechos.

Desde el momento en el que entraron en la estancia, no se emitió nada. Tal y como la propia Carlota Prado desveló, las imágenes están en su poder , y en ellas se la puede apreciar pidiendo que José María detuviera su actitud y, poco después, cayendo inconsciente. Fue entonces cuando el agricultor murciano, presuntamente, abusó de ella. Varios compañeros entraron en el dormitorio mientras, pero José María les aseguró que estaba «cuidándola» . Además, las cámaras, que registraron esos momentos, estaban vigilando, y aunque hay trampillas diseñadas para que el equipo pueda intervenir en caso de necesidad, nadie entró para que José María parara.

Una de las principales reclamaciones que hace Carlota con el paso señalan a la actitud que tuvo el programa con ella en aquellos momentos. No solo no intervinieron en la casa, sino que, además, expulsaron al concursante al día siguiente por la tarde, dejándola conviviendo con su presunto agresor durante toda la mañana. José María, además, en ningún momento le reveló lo sucedido. El programa, tras llamar al murciano para acudir al confesionario, le expulsó disciplinariamente, y después solicitaron la presencia de Carlota.

Fue entonces cuando Carlota descubrió lo sucedido. Le notificaron la expulsión y le pidieron que mirara a la pantalla que tenía ante ella. Fue entonces cuando vio, por primera vez y completamente sola, las imágenes de lo que sucedió en ese dormitorio. Tal y como desveló, no se lo podía creer, y fue entonces cuando la sacaron del concurso para que recibiera atención psicológica.

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