Finlandia encuentra su «Paraíso» en Málaga

Fran Perea, un ídolo en el país nórdico gracias a «Los Serrano», encabeza el reparto de la serie

Fran Perea MEDIAPRO
Helena Cortés

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La malagueña Costa del Sol , y más concretamente Fuengirola, acoge a la comunidad de finlandeses más numerosa que existe en el extranjero, con unos 15.000 habitantes. En su tranquila burbuja nórdica bañada por el sol del Mediterráneo tienen sus propios supermercados, escuelas, medios de comunicación... Por eso no es de extrañar que la cadena pública finlandesa, haya escogido esta localización para situar su primera coproducción europea fuera de los países nórdicos: «Paradise» («Paraíso» en castellano), un thriller que se adentra en la revolución que vive esta apacible localidad cuando comienzan a sufrir una serie de asesinatos.

Fran Perea , toda una estrella en Finlandia gracias al éxito de «Los Serrano», es el protagonista de esta serie policiaca coproducida por Ran Tellem («Homeland»), responsable de desarrollo de contenido internacional de Mediapro Studio. El actor y cantante da vida al detective malagueño Andrés Villanueva, que ayuda a la agente finlandesa Hilkka a desentrañar dos homicidios que acabaron con la vida de varios finlandeses. Ambos desarrollarán pronto una relación profesional y personal muy particular en la que se ayudan y necesitan. «Es una locura, porque la propuesta me pilló completamente por sorpresa, pero estoy enamorado de la energía de este equipo, y de lo educados y divertidos que son», confiesa el intérprete. «Lo bueno de este personaje, que habla inglés cuando interactua con los finlandeses, es que tengo la posibilidad de hacer mi primer trabajo en otro idioma sin la presión de tener un acento distinto», puntualiza.

Pero la investigación criminal es solo uno de los pilares de «Paradise», que se estrenará en diciembre en Finlandia, aunque aún no tiene cadena en España. La serie también aborda el drama personal de Hilkka (Riitta Havukainen), que se ve obligada a dejar su trabajo para cuidar de su marido, aquejado de demencia. Sin embargo, los homicidios ocurridos en Málaga devuelven a la detective a la primera línea de fuego. «“Paraíso” está muy bien escrita y es muy fresca, porque no es normal que una mujer de mi edad sea la protagonista. La pareja típica es una mujer joven con un hombre mayor», apunta la veterana intérprete, que rodó gran parte de su trama en la localidad finlandesa de Oulu. Ahora, en la recta final de sus grabaciones, se han trasladado a Málaga, donde la ficción descubre también los secretos que guardan varios personajes españoles, encarnados por María Romero («El Olivo»), Óscar Zafra («La casa de papel») y Emilio Palacios («La zona»).

«“Paraíso” tiene todos los ingredientes del thriller, pero también otros elementos, ya que habla de la memoria, de gente que olvida y otros que tienen problemas para olvidar. Otro aspecto que trata es la pérdida», reflexiona Zafra. «Al final, lo importante no es la lengua o la cultura, sino entendernos y compartir la experiencia . Yo cuando actúo no pienso en el idioma, sino en mirar al otro a los ojos y hacerlo bien», apunta la joven Romero.

Antes de escribir los ocho capítulos de la primera temporada, el equipo entrevistó a agentes malagueños para documentarse sobre los problemas y sucesos que se dan en la zona, más de los que preveían. En cambio, cuando hablaron con los finlandeses de la zona la respuesta desconcertante: «Aquí nunca pasa nada, esto es un paraíso», les dijo una anciana. De ahí cogieron la idea que da título a la serie.

Aunque «Paraíso» está escrita originalmente en inglés, en la pantalla esta lengua se alterna con el finés y el castellano en función de los personajes que interactúen entre sí en cada escena. «El equipo es acojonante», bromea la directora, Marja Pyykkö («Hooked»), capaz de dar órdenes y defender su serie mezclando los tres idiomas. «Los españoles hablan con un ritmo más rápido, usan más palabras y gesticulan más con las manos», añade.

Como temía que fuera complicado unir dos culturas, lenguas y estilos artísticos, pidió tener dos semanas de ensayos previos al rodaje en los que comprobó que, realmente, no había diferencias insalvables. «Todos estamos muy centrados en entretenernos, respetarnos y disfrutar. En mis rodajes no me gusta que nadie tenga que gritar ni que haya estrés», cuenta Pyykkö. En el rodaje se percibe que han encontrado hábitos universales: al que le suena el móvil mientras graban una escena invita a cañas al resto del equipo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación