Milicianos del cuerpo de seguridad de Hamás matan a un oficial de la Policía palestina

Milicianos del Movimiento islámico de Hamas, según fuentes policiales palestinas, han matado hoy a un oficial de la Seguridad Preventiva, mientras que otras dos personas han resultado heridas en un tiroteo en el hospital Shifa de la ciudad de Gaza.

El oficial fue atacado con armas automáticas cuando circulaba en su coche, según portavoces de ese organismo de seguridad, cuyo jefe, el coronel Rashid Abu Shbak, se salvó el pasado fin de semana de un atentado contra su vida. El incidente en el hospital Shifa se produjo cuando efectivos de la seguridad Preventiva trasladaron el cadáver de la víctima y milicianos del movimiento de Al Fatah se enfrascaron en un tiroteo con miembros de la Fuerza de Asistencia creada por Hamas.

Una incursión israelí en Ramala deja tres palestinos muertos

Además, al menos tres palestinos han muerto hoy y otros 34 han resultado heridos en intensos enfrentamientos con soldados israelíes en la ciudad cisjordana de Ramala, según información de las fuerzas de seguridad palestinas, que recoge el diario 'Haaretz' en su edición electrónica, que han precisado que los disturbios se produjeron cuando los soldados entraron en la ciudad para llevar a cabo arrestos de milicianos.

Según la radio israelí, soldados israelíes que iban de incógnito detuvieron a un miliciano de la Yihad Islámica en Ramala. El detenido sería Mohamed Shubaki, de la localidad cisjordana de Kalkilia. En una llamada telefónica a Associated Press, la Yihad Islámica confirmó la detención, y según funcionarios palestinos en total fueron detenidos cincos milicianos. La familia de Shubaki indicó que éste había sido puesto en libertad de una prisión israelí el año pasado tras cumplir una pena de 20 años.

Según la Policía palestina, milicianos armados abrieron fuego contra el vehículo en el que viajaban los soldados israelíes de incógnito, y que posteriormente se incendió. El Ejército israelí informó de que sus soldados habían sido atacados y que uno de ellos resultó herido leve por una pedrada.

Según fuentes médicas, uno de los tres palestinos fallecidos recibió un disparo en el ojo con una bala real, mientras que al menos quince de los heridos fueron alcanzados por balas recubiertas de goma. No obstante, el Ejército israelí afirma que sus soldados dispararon al aire y que no tienen constancia de ninguna víctima en los incidentes ocurridos en la plaza central Manara.