Economia

La CNE achaca sus diferencias con el TDC a distintos enfoques del mercado energético

La presidenta del regulador sale al paso de las acusaciones de politización en los órganos supervisores por la actuación en la OPA de Gas Natural Sostiene que la concentración no incrementa el poder de la compañía resultante

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Las diferencias entre la Comisión Nacional de la Energía (CNE) y el Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) respecto a la oferta de compra de Endesa lanzada por Gas Natural responden a «diferentes enfoques» sobre los mercados eléctrico y gasista. Así lo defendió ayer la presidenta del regulador energético, Maite Costa, quien sostuvo que ambos organismos han manejado distintos «indicadores y metodologías» para medir las cuotas de negocio de cada empresa.

Y ello explica, según sostuvo, que hayan llegado a conclusiones divergentes sobre el impacto que tendrá la concentración en el sector. Costa salía al paso de las acusaciones de politización que han sufrido los supervisores por su actuación en la OPA de la gasista catalana. El informe favorable a la operación de la CNE y el dictamen contrario del órgano jurídico de la Competencia son, a su entender, igual de «legítimos» y por ello carece de sentido «entrar en ningún tipo de debate».

Informes opuestos

El Consejo de Ministros tiene que decidir sobre la operación antes del 5 de febrero. La CNE, con mayoría de miembros elegidos por el actual Gobierno, le ha propuesto que la apruebe con condiciones. Por contra, el TDC apuesta por vetarla, pues cree que la imposición de venta de activos no bastará para mitigar los efectos perversos de la operación.

La máxima dirigente de la CNE apuntó que el mayor reto a que se enfrentan los reguladores es compatibilizar la defensa de los consumidores con los «legítimos» intereses de las empresas. Costa indicó que el sector energético mundial se ha visto modificado por los procesos de concentración y abogó por que la política de defensa de la competencia se adapte a estos cambios.

Así, mantuvo que las formas tradicionales de medir las posiciones de poder en los mercados están en crisis y opinó que es «difícilmente demostrable» que las estructuras concentradas provoquen siempre un mayor poder de las compañías. Por contra, apostó por incorporar nuevos instrumentos de análisis que tengan en cuenta otros elementos para valorar los oligopolios. MÁS INFORMACIÓN EN www.lavozdecadiz.com