SAN FERNANDO

La oposición denuncia el alto coste de la Zona Azul para los residentes de las calles afectadas

El precio por estacionamiento, 50 céntimos diarios, supondrá un desembolso de más de 180 euros anuales para los usuarios

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La instauración de la polémica Zona Azul sigue provocando el enfado de los conductores isleños y de los partidos de la oposición. El último motivo que ha contribuido a crispar los nervios del colectivo afectado ha sido la noticia de que las tarifas para residentes del Servicio de Ordenación y Regulación de Aparcamientos, que arranca el próximo viernes en San Fernando, se encuentran ente las más altas del territorio español. Los habitantes de las 19 calles incluidas en el trazado deberán pagar 50 céntimos diarios para poder estacionar su vehículo, lo que suma una cifra anual de 182,50 euros -frente los 17,20 euros que pagan cada año los residentes de la capital gaditana por un servicio idéntico-.

Escasa aceptación

La Federación de Asociaciones de Vecinos Isla de León y los grupos de la oposición ya han manifestado su descontento ante el elevado coste de la Zona Azul. Ambas entidades afirman que la empresa concesionaria, Dornier S.A, pretende rentabilizar el servicio mediante el cobro de grandes cantidades a los residentes.

Dichos colectivos no comprenden cómo ahora los conductores deberán de empezar a pagar un hábito tradicionalmente gratuito. Ciudadanos y políticos no ven justo el cobro de una cantidad por aparcar el coche en la calle sin que ello conlleve algún tipo de ventaja o asegure la vigilancia del vehículo cuando su dueño se encuentre ausente.

El concejal socialista Carlos García Caballero se ha pronunciado al respecto afirmando que la extensión de la superficie de Zona Azul delimitada por el equipo de gobierno andalucista «es exagerada debido al excesivo número de calles que se ha incluido en ella». De esta forma, el grupo municipal socialista solicita al equipo de gobierno una moratoria en la puesta en marcha de la Zona Azul y que se lleve nuevamente al Consejo Asesor de Tráfico para proceder a su redelimitación.

La portavoz popular, Carmen Pedemonte, también solicita una reunión de urgencia ante dicho organismo para minimizar el perjuicio a los residentes. Pedemonte opina que el uso previsto para el servicio se aleja de su planteamiento inicial: « facilitar el impulso del Centro Comercial Abierto y el uso de los estacionamientos en el centro urbano».

Ante las reacciones adversas, el Consistorio isleño ya negocia con Dornier la aplicación de una tarjeta para abaratar los precios a los residentes y estudia sondear la opinión de los usuarios del servicio una vez que éste lleve funcionando varios meses.

La delegada de Tráfico, Juana Márquez, acusa a ambos partidos la oposición de obrar haciendo gala de un claro obstruccionismo político. Por otro lado, Márquez se defiende de la comparativa establecida entre los precios de la Zona Azul isleña y los de la gaditana recordando que «en Cádiz, la tarifa anual para residentes solamente permite el estacionamiento durante dos horas al día -a excepción de los sábados- debiendo abonar el resto del horario la tarifa ordinaria, que asciende a 0,65 euros por cada hora».