Las plantillas de Policía y Guardia Civil son insuficientes ante la inseguridad ciudadana

Las plantillas del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil en El Puerto siguen siendo cortas para poder realizar sus competencias con solvencia.

La inseguridad ciudadana, sobre todo en algunos barrios de la ciudad como la Inmaculada, los Milagros o los Frailes por temas de vandalismo o tráfico de drogas, el penal de Puerto III, la vigilancia rural o las competencias de costas son labores a desarrollar por estos dos cuerpos. Pero actualmente los efectivos no son suficientes.

El pasado mes de mayo hubo un saldo positivo de 10 incorporaciones de policías a la ciudad, cuando en realidad se esperaban cubrir 62 plazas. Debido a la marcha de otros tantos por jubilación o destino, la cifra final se saldó con tan sólo 10 nuevos agentes nacionales.

Un grave problema es el abastecimiento de la Academia Nacional de Policía. El último año de Gobierno del Partido Popular se convocaron 4.500 plazas y en el actual se han convocado otras 5.000. El problema es que aquellas del PP se repartieron de tal modo por el territorio nacional que no se notó un incremento importante en la ciudad. El problema de los 5.000 agentes que se están formando a día de hoy, es que no saldrán hasta 2007. Mientras, las necesidades de El Puerto no pueden esperar.

Mafias

Organizaciones como el Sindicato Unificado de Policía y la Asociación Unificada de Guardias Civiles han explicado a LA VOZ que bandas extranjeras dedicadas al narcotráfico y al crimen organizado empiezan a intentar su instalación en la provincia. La semana pasada ya se detuvo en Rota un gran alijo de cocaína que puede corroborar estas opiniones. Es la Guardia Civil quien tiene las competencias de costas y quien se debe encargar de luchar contra estas bandas y para ello hace falta más personal para llevar a cabo una lucha más exhaustiva.

Aurelio Sánchez, líder del Partido Popular local, quiso destacar que hasta que «se eliminó la Policía de proximidad, esos agentes motorizados de barrio cuya misión era vigilar colegios, trapicheos y altercados para informar a la Policía y que ésta interviniera». Ante la falta de agentes, los destinados a esta labor tuvieron que ser reubicados. Otro asunto es la vigilancia rural, actualmente entra las laborees de la Policía Nacional, no puede realizarse con eficiencia por falta de medios y plantilla.