El fútbol
Al Bernabeu acudieron ¡cincuenta mil madridistas! para oír cómo un futbolista belga decía que estar allí era el sueño de su vida
A mediados de los sesenta, un nombre se levantó en España con una fuerza descomunal, desconocida. Un apodo que arrollaba, que lo ocupaba todo, álbumes, cajas de cerillas, revistas, radio, la naciente televisión, tertulias. Un apodo, una sonrisa y un flequillo: El Cordobés. Una locura ...
Artículo solo para suscriptores
Si ya estás suscrito, inicia sesión
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete