La mentira como estrategia política
Definitivamente nos hemos aborregado, hemos dejado que el embuste se instale en nuestro día a día sin que tenga consecuencias
Definitivamente, nos hemos aborregado. Quizá por la pandemia, quizá por simple desidia, nos hemos convertido en una sociedad dormida. Conformista. Más allá de cuatro mensajes de otros tantos tuiteros con afán de protagonismo, hemos caído en la indiferencia. Casi sin darnos cuenta, hemos dejado que ...
Artículo solo para registrados