Fuese y no hubo nada
Susana Díaz trató ayer de quitarle importancia a lo que, pese a su formalismo parlamentario, fue el último acto político de un régimen de secano que se ha perpetuado durante casi cuatro décadas, un endemismo sin par en Europa y cuyo final exigía altura de ...
Artículo solo para suscriptores
Si ya estás suscrito, inicia sesión
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete