Plaga de langostas en Madagascar
Plaga de langostas en Madagascar - FAO
PRÓXIMOS SEIS MESES, CRUCIALES

Un pequeño enjambre de langostas come la misma cantidad de alimentos diarios que 35.000 personas

La FAO insta a estrechar la vigilancia en zonas costeras de África y ambas orillas del Mar Rojo para evitar que los insectos pongan en riesgo la seguridad alimentaria

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Las fuertes y generalizadas lluvias que han caído recientemente en el noroeste y el cuerno de África y Yemen podrían favorecer la cría de langostas del desierto, advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). La vigilancia estrecha en los próximos seis meses será necesaria para evitar que los insectos formen enjambres destructivos», sugiere la institución.

«Los efectos de una plaga de langosta en los cultivos y pastos ponen en peligro la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia rurales», comenta Keith Cressman, experto de la FAO en prevención.

Los enjambres de langostas pueden desplazarse hasta 150 kilómetros al día empujadas por el viento

Un pequeño enjambre se come la misma cantidad de alimentos a diario que unas 35.000 personas.

Tras levantar el vuelo, enjambres de decenas de millones de langostas pueden desplazarse hasta 150 kilómetros al día empujadas por el viento. Un insecto adulto puede consumir más o menos su propio peso en alimentos frescos por día: alrededor de dos gramos. Las hembras llegan a poner 300 huevos a lo largo de su vida.

La situación en los países normalmente afectados por la plaga de langosta se mantuvo en general tranquila en octubre, habiéndose detectado tan solo la cría de insectos en pequeña escala. Sin embargo, los expertos de la FAO han alertado de posibles cambios, en parte debido al impacto de El Niño en África y los ciclones tropicales Chapala y Megh en la península Arábiga y el cuerno de África.

«Los fenómenos meteorológicos extremos, incluyendo las lluvias torrenciales, tienen el potencial de desencadenar un aumento masivo en el número de langostas. La lluvia aporta humedad al suelo (que absorben los huevos de los insectos) y propicia el crecimiento de la vegetación (donde se alimentan y refugian las langostas)», detalló Cressman.

Inundaciones y cuantiosos daños

La FAO ha estado monitoreando la situación en el noroeste de África, donde a finales de octubre cayeron lluvias inusualmente fuertes en un amplia área del norte de Mauritania, las zonas adyacentes del Sáhara Occidental, el sur de Marruecos y de Argelia y el suroeste de Libia.

En el cuerno de África se prevén lluvias superiores a la media asociados con un evento muy marcado de El Niño en el norte de Somalia durante este invierno y la próxima primavera. En ese caso, las condiciones ambientales serán favorables para la cría en la costa noroeste y la meseta somalí.

Si continúan las lluvias podrían criarse dos generaciones de insectos este año en Sudán y Yemen

Las fuertes lluvias asociadas al ciclón tropical Chapala descargaron en zonas costeras e interiores del sur de Yemen a principios de noviembre, seguidas una semana más tarde por el ciclón tropical Megh, que también afectó al noreste de Somalia. Estas lluvias torrenciales -que superaron con creces el promedio anual de precipitaciones para todo el año- causaron inundaciones y cuantiosos daños.

En las áreas de cría de invierno de langosta en ambas orillas del Mar Rojo, las lluvias estacionales comenzaron a principios de octubre, un poco antes de lo normal. De continuar, habría tiempo suficiente para que críen dos generaciones de insectos este año en las zonas costeras de Sudán, el norte de Eritrea, sureste de Egipto, Arabia Saudita y Yemen.

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