Autoridades federales expulsan a Tesla de la investigación de su último accidente mortal

Por su parte, el fabricante de deportivos eléctricos ha negado esta afirmación y indica que ha salido voluntariamente

EFE/ABC MOTOR

El pasado 23 de marzo, un Model X se vio implicado en un accidente mortal en California. El modelo de Tesla se estrelló contra una mediana de hormigón que dividía la calzada. Al volante iba un conductor de 38 años, que falleció poco después del choque , y que había puesto en funcionamiento la opción de piloto automático. Según los estudios de la compañía, el conductor había recibido varias advertencias visuales y una auditiva del sistema de piloto automático para que pusiera sus manos en el volante.

«Las manos del conductor no fueron detectadas en el volante durante los seis segundos previos a la colisión», explicó Tesla en su página web, donde añadió que el fallecido «tuvo cinco segundos y 150 metros de visión despejada de la mediana de hormigón», pero «no tomó ninguna acción» .

Posteriormente, la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de Estados Unidos, ( NTSB , por sus siglas en inglés) informó de que las autoridades del país han abierto una investigación sobre este accidente . Aunque, pocas semanas después, dichas autoridades han indormado en un comunicado que había decidido expulsar a Tesla de la investigación del accidente mortal ya que la compañía incumplió un acuerdo «al dar a conocer información antes de que fuera aprobada y confirmada por NTSB».

«La diseminación de información incompleta a menudo provoca especulación y asunciones incorrectas sobre la causa probable de un accidente, lo que hace un flaco favor al proceso investigador y al público», afirmó NTSB. Asimismo, el director de NTSB, Robert Sumwalt , incluso reveló que informó personalmente en la noche del miércoles al fundador de Tesla, Elon Musk , de la decisión de echar a su marca de la investigación.

Informaciones erróneas

No obstante, Tesla ha negado la declaración de NTSB y ha señalado también en un comunicado que ha decidido retirarse y emitir una declaración «para corregir afirmaciones erróneas que se han realizado sobre Autopilot». «Tesla se retiró del acuerdo con NTSB porque exige que no demos a conocer información al público sobre Autopilot, una exigencia que creemos afectar fundamentalmente de forma negativa la seguridad pública», añadió la compañía.

Autopilot es el sistema de conducción semiautónoma de Tesla y que ha estado implicado en al menos dos accidentes mortales de vehículos del fabricante. Los sistemas de conducción autónoma se han convertido en uno de los activos más valiosos del sector ante su potencial para cambiar radicalmente el mundo del automóvil y generar miles de millones de dólares en ingresos.

Los principales fabricantes de automóviles del mundo y compañías como Google, Apple o Uber están involucrados en una «carrera tecnológica» para ser los primeros en poner el mercado un sistema de conducción autónomo.

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