Performance Line: la artillería pesada de DS para competir con las marcas «premium» alemanas

Más refinados, más deportivos, más exclusivos. Así son los coches de la nueva gama Performance Line de DS, con la que la joven marca francesa busca de forma abierta competir con las marcas «premium» alemanas por el cliente más exigente.

En este sentido, la gama Performance Line añade un toque extra de lujo y deportividad, de forma similar a los paquetes S-Line de Audi y M de BMW, aunque sin cambios en el chasis, la suspensión ni las motorizaciones, al menos de momento. También permitirá a la marca continuar diferenciándose de Citroën, de quien se escindió hace dos años, a la espera de que lleguen al mercado los primeros modelos con ADN íntegramente DS, como el DS7 crossback, que aterrizará en los concesionarios a finales de 2017.

Disponible en los concesionarios españoles desde el pasado noviembre para el DS3, DS3 cabrio, DS4 y DS5, la Performance Line gira en torno a los colores carmín, blanco y oro, que simbolizan la pasión, la pureza y la victoria, respectivamente. Así, este nivel de acabados incorpora un logo específico con estos colores, así como carrocería bitono con techos en negro, llantas más grandes, detalles en color en puertas, volante, espejos, palanca de cambios y cuadro de instrumentos. También una nueva tapicería de cuero granulado, llamada «Dinámica» por la marca, con inserciones «Performance Line».

Todo ello elaborado con materiales de mejor calidad, lo que aporta un plus de calidad a la gama que se percibe tanto por dentro como por fuera. Según Diego Rey, jefe de producto de DS, la Performance Line ha tenido una gran acogida entre los compradores. «Supone ya un 20 por ciento de las ventas, y un 30 por ciento en el caso del DS5. Nos está funcionando muy bien».

En cuanto a conectividad y entretenimiento, destaca la pantalla táctil y la función mirror link para smartphones con Android o iOs.

Respecto a las motorizaciones, la gama se construye con los propulsores más potentes de la paleta del grupo. Así, el DS3 y DS cabrio montan en su versión gasolina dos Puretech de 110 CV y uno de 130 CV, motor este que comparten con el DS4, que añade otro de 165 CV usado a su vez por el DS5. Este último modelo puede escogerse también con un motor de 210 CV, por ahora el más potente de la gama. En diésel, las opciones pasan por los también conocidos Blue HDi de 100 y 120 CV del DS3, 120, 150 y 180 del DS4 y 150 y 180 CV S&S EAT6 del DS5.

Desde la marca se asegura que los propulsores elegidos buscan garantizar las mejores sensaciones al volante ofreciendo un par «al mejor nivel del mercado». Los precios parten de los 21.480 euros del DS3 Performance Line PureTech 110 cv y llegan a los 38.930 del DS5 BlueHdi 180 EAT6.