Un camarero prepara un cóctel en el Punk&Bach del Paseo de la Castellana
Un camarero prepara un cóctel en el Punk&Bach del Paseo de la Castellana - abc

Cócteles con premio en la Castellana

Punk & Bach, elegido como una de las diez mejores coctelerías de España, combina gamberrismo y elegancia

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El concepto de «brasserie ilustrada y canalla» de Punk & Bacha ha triunfado en Madrid, y fuera de él. Porque esta elegante coctelería con terraza en pleno paseo de la Castellana ha sido galardonada con un «Coaster Award», un premio al que optaban más de 400 locales de toda España, y que sólo diez han conseguido.

Punk & Bach es el único de la capital (los demás están en el País Vasco, Cataluña, Valencia, Andalucía, Islas Canarias, Castilla y León, Navarra, Asturias y Baleares), y es que no es fácil cumplir los requisitos de este certamen, que exige que los candidatos hayan desarrollado iniciativas propias de consumo responsable.

El local, que se puede visitar de 10 de la mañana a 2 y media de la madrugada de lunes a domingo, se presenta como una combinación de aspectos elegantes y gamberros (de ahí el nombre de Punk & Bach).

Además de alta coctelería, se puede disfrutar de una selección de «Punk aperitivos», y también de cocina tradicional con un guiño a la gastronomía vasca, basada en el «mejor producto y una renovada presentación con toque canalla, para ofrecer una experiencia sin precedentes».

Es, además, una cocina basada en el concepto «non-stop» que permite disfrutar de una perfecta selección de aperitivos en barra, una comida tardía, la merienda, una copa a media tarde o una cena hasta el cierre del local. Además, su oferta de platos «take away» está disponible 24 horas.

La coctelería es exclusiva, con una carta propia elaborada por Adrián Sehob, uno de los mejores cocteleros de Madrid, incluyendo clásicos como la Margarita, el Pisco Sour, el Cosmopolitan o la Caipiroska, pero también sorprendiendo con bebidas como el Champange-Mojito, el Bésame tonto (puré de melocotón y champange), el Annie Hall (Tanqueray 10, Vermouth Rojo, Campari y golpe de Martini Royale) o el Perdición (Grand Marnier, Chantreuse, hierbabuena y sirope de azúcar moreno), todos ellos por nueve euros.

Además hay una extensísima variedad de Gin Tonics (entre 8 y 12 euros), y una sección de «fake-tonics» de lo más curiosa. Su espectacular terraza, de 90 metros cuadrados, tiene una decoración de estilo colonial con maderas oscuras y muy acogedoras, acompañadas por bombillas descolgadas y tapicerías aterciopeladas. Además, este verano cuenta con una nueva carta exclusiva diseñada por el chef Iñaki Rodaballo.

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