La agencia de calificación de riesgo Standard & Poor's (S&P) mantiene estable el rating de Galicia, de forma que califica su deuda en BBB, al tiempo que destaca la «satisfactoria» gestión financiera de la Comunidad y el cumplimiento del déficit por parte de la Xunta.
Una nota inferior a la que atribuiría la propia agencia, cuya norma impide que una Comunidad en régimen común, a excepción de las forales, mejore su calificación con respecto al Estado. Así, de acuerdo a sus criterios, el nivel de crédito indicativo (ICL), que refleja el nivel de solvencia que la agencia otorga a Galicia, sitúa su rating en BBB+.
S&P no solo aplaude la gestión financiera de la Xunta, sino que llama la atención sobre una «liquidez adecuada y unos pasivos contingentes bajos», para fijarse en un esfuerzo de consolidación fiscal en los últimos años, muy por encima de la media del resto de autonomías.
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