Para Pilar Sánchez, el principal error en la planificación de la Ciudad del Flamenco se encuentra en el origen, en el encargo del trabajo a los arquitectos suizos Herzog y DeMeuron, o, al menos, en el presupuesto que aceptó Pedro Pacheco por la redacción del mismo por parte de este estudio, que cobró nueve millones de euros por dar forma a la idea. «La adjudicación del proyecto fue de 1.500 millones, que no sé si habrá algún proyecto más caro en todo el mundo, no sé si lo hay, yo lo dudo», manifestó la regidora.
Herzog y DeMeuron se encargaron del proyecto tras ganar un concurso internacional de ideas que convocó la Gerencia Municipal de Urbanismo.
