Domingo, 5 de noviembre de 2006
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Jerez de las rotondas
En el núcleo urbano de Jerez existen 86 glorietas de todo tipo, y aún faltan muchas más por construir
Jerez de las rotondas
VENENCIA. La glorieta Manuel Simó de la Riva, cuya primera venencia tuvo que ser sustituida por otra más fiel al movimiento de este instrumento, surgió de la elevación del tren.
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Así las define la Dirección General de Tráfico: «tipo de intersección caracterizado porque los tramos que en él confluyen se comunican a través de un anillo en el que se establece una circulación rotatoria alrededor de una isleta central». La Real Academia de la Lengua es más concisa: «plaza circular». Pero para los jerezanos, las rotondas significan tormento en hora punta, desconcierto a la hora de circular por ellas, y por qué no decirlo, rapidez cuando no hay tráfico, al evitar el tedio de los semáforos.

Desde que a finales de la década de la década de los ochenta las rotondas comenzaran a proliferar como setas, el imaginario popular jerezano las relaciona con el gusto personal del entonces alcalde y ahora primer teniente de lo mismo, Pedro Pacheco.

De su extenso mandato como regidor procede la mayoría de las 86 rotondas que actualmente jalonan las calles y rondas de Jerez, una cifra que LA VOZ ha recabado directamente de la guía urbana editada por el propio Ayuntamiento de Jerez, ya que el Consistorio no tiene ningún tipo de registro del número total de glorietas de la ciudad.

Aunque ya existía alguna que otra pequeña rotonda, como la del Gallo Azul, fue al amparo del PGOU de 1984 cuando Jerez empezó a circular en redondo.

Desde entonces, las rotondas se han convertido en un emblema de la ciudad, hasta tal punto que el jugador argentino del Xerez Gonzalo del Bono afirmó recientemente a LA VOZ que las cosas que más le llaman la atención de Jerez no son ni las bodegas, ni los caballos, ni el flamenco, sino sus rotondas.

Aplicación

La nueva concepción viaria se comenzó a aplicar con polémica en los nuevos desarrollos de la ciudad, como los alrededores del entonces nuevo estadio de fútbol, concretamente en la glorieta de Chapín, que estuvo paralizada durante un tiempo debido a problemas legales, que bloquearon las obras.

Sin embargo, la glorieta que más chocó entonces por sus grandes dimensiones fue precisamente una que no ejecutó el Ayuntamiento de Jerez, sino el Ministerio de Obras Públicas.

Se trata de la rotonda con cuatro carriles situada bajo el nudo de Cuatro Caminos, junto al tanatorio, que eliminó el antiguo cruce de la N-IV con la calle Cuatro Caminos, y que sigue siendo la de mayor diámetro de la ciudad. La mayor explosión circular se vivió a partir del PGOU de 1995, que auspició la urbanización de la Ronda Este, con siete rotondas de nuevo cuño, la integración del ferrocarril, con otras cinco glorietas más, o la prolongación de la avenida de Arcos, que acarreó otras cinco. El proceso se aceleró además para culminar a tiempo la transformación de cara a los Juegos Ecuestres Mundiales de 2002.

La variedad abarca hasta rotondas rectangulares, como la que surgió el año pasado de la reforma de la plaza del Caballo, u ovoides, como habrán podido percibir los usuarios de la glorieta alcalde Miguel Primo de Rivera. Incluso existe un Residencial La Rotonda, como no, junto a la infraestructura que le da nombre, en Las Delicias.

Una de las peculiaridades del Consistorio jerezano, aparte de su particular predilección por este tipo de intersección, es su gusto particular a la hora de adornar tan singulares enclaves. Muestras hay para todos los gustos: los caballos de colores en Sementales, el minotauro sin cabeza, -la mayor escultura urbana realizada en bronce de España-, la venencia de Simó de la Riva, el motorista de la avenida de Arcos, o la rotonda del Caballo de Troya, tan dada a juegos fáciles de palabra. El nuevo PGOU mantiene además la idea de adornar las glorietas de la Ronda Este con números y Pacheco insistió hace unos días en que una estatua de la diosa Europa adornará una de las glorietas de la avenida a la que da nombre.

Y por si los jerezanos no tenían suficiente con las 86 rotondas actuales, nuestras autoridades preparan una nueva ofensiva que se plasmará en la actual circunvalación de la N-IV y en los nuevos crecimientos de la ciudad, que seguirá haciendo honor a su nuevo nombre: Jerez de las rotondas.

 
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