El PSOE está convencido de que la próxima cita electoral de 2007 puede devolverle el mapa político de la década de los ochenta y gobernar en una treintena de municipios. Bajo esta premisa, los objetivos marcados serán: en La Janda, Barbate; en la Bahía de Cádiz se ven opciones en San Fernando y Puerto Real, y en la Sierra, pelearán por Ubrique, Espera y Torre Alháquime. Sin embargo, el mayor reto será la Costa Noroeste, donde tendrán que volcarse en Sanlúcar y Rota, y afianzar Chipiona, dejando al margen Trebujena, donde los resultados aplastantes de IU dejan muy lejana la victoria.

Para este último propósito, el primer paso será zanjar la bicefalia existente en Sanlúcar. Única ciudad de más de 50.000 habitantes de Andalucía en la que dos nombres, Germán Mora e Irene García, se disputan el liderazgo de la lista que se medirá con la popular que encabeza la actual alcaldesa, Laura Seco.

Fuentes del PSOE confían en que el diálogo prospere y que surja, tras esta fase inicial de propuesta, que no de designación, un candidato de consenso, porque de lo contrario se incurriría en una irresponsabilidad, y en el que queden satisfechas todas las direcciones del partido, tanto local como provincial, regional y federal, pero sobre todo la militancia. Y es que el candidato y su candidatura tendrán que pasar, al final del proceso, el filtro asambleario a celebrar, de acuerdo con el calendario fijado, entre el 20 de noviembre y 3 de diciembre.

Sobre la posible aparición de un tercer candidato y que éste pudiera ser el viceconsejero de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, Luis García Garrido, estas mismas fuentes aclaran que estuvo como opción en legislaturas anteriores, circunstancia de la que ahora no se tiene constancia de que concurra ni de que se haya planteado. Es más, hasta se descarta, porque demasiada complejidad ya entraña de por sí resolver la situación existente con los dos nombres ya presentados.

Aunque el triunfo sobre el PP es difícil, puesto que entre una formación y otra hay ocho concejales de diferencia -el PP gobierna con trece concejales y el PSOE sólo logró cinco-, y de ser así, deberá pasar casi de manera obligada por una alianza múltiple, el principal desafío socialista es arrebatar la mayoría absoluta a los populares.

En cuanto a Rota, la diferencia mínima de un centenar de votos que apartó a Domingo Sánchez Rizo de la Alcaldía en virtud de la alianza entre PP y Roteños Unidos, se espera superar y recuperar. Para ello, confían en que en el cartel de campaña esté éste político, que logró diez ediles frente a los once que sumaban sus oponentes, y que tendría que abandonar la Delegación Provincial de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía que en estos momentos detenta de prosperar su nombramiento.

Chipiona

Por lo que respecta a Chipiona, las divergencias habidas entre la concejal de Hacienda, Esperanza Rodríguez, y el alcalde, Manuel García, se consideran más que superadas tras el cese de esta edil. Las diferencias, aparte de tener su origen en aspectos de gestión, podrían haber sido fruto del nerviosismo y los roces que surgen ante la proximidad de un proceso electoral y más aún, cuando quien detenta la Alcaldía es alguien no elegido en un proceso natural, sino por la dimisión de su antecesor, Dolores Reyes, y porque otro, en este caso Rodríguez, se veía también como posible candidato.

Desde el PSOE, se insiste en que en Chipiona, por fin, la situación está estabilizada con García, después de los vaivenes resultantes del caso Sanlúcar y de la etapa de Reyes.