Los 71 millones de electores mexicanos han tenido tres días de reflexión para decidir su voto en una consulta que se perfila como la más reñida y cara de la historia. De acuerdo a las encuestas, las opciones se presentan en este orden: cambio de rumbo, continuidad o regreso al pasado. Pero el triunfo puede ser de cualquiera. La capital de México está empapelada de publicidad. Los canales de televisión emitieron hasta el miércoles anuncios pagados por las campañas de los cinco aspirantes presidenciales y por empresarios. Incluso circuló un tebeo en el que el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, favorito con un 36% de intención de voto, fulmina a sus dos rivales más directos.

En el dibujo, Felipe Calderón, candidato del oficialista Partido de Acción Nacional (PAN) (34%), y Roberto Madrazo, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) (27%), aparecen como malvados superhéroes. Aunque los comicios son generales y se renuevan los 500 escaños del Congreso y la mitad del Senado, se eligen cuatro gobernadores, y alcaldías y otros cargos municipales, la contienda que despierta más interés es la sucesión presidencial para los próximos seis años. Entre tres aspirantes se dirimirá el sustituto de Vicente Fox. Los otros dos, Patricia Mercado, única mujer que ambicionaba el cargo, por Alternativa, y Roberto Campa, de Nueva Alianza, no tienen ninguna posibilidad. A pesar de las denuncias y alertas sobre posibles fraudes, el Instituto Federal Electoral (IFE), encargado de la primera consulta democrática del país -gobernado por el mismo partido, el PRI, durante 71 años-, asegura que no habrá problemas. Tanto López Obrador como Calderón se han dedicado a atacarse mutuamente. Por su parte, Madrazo ha centrado su campaña en destacar los fallos del Gobierno de Fox, quien, casi por sorpresa, acabó en el año 2000 con su hegemonía.

Unos 340.000 efectivos de las fuerzas de seguridad garantizarán que no haya alteraciones del orden en las 130.500 mesas electorales. Los colegios abrirán de 8.00 a 20.00 horas, porque en el país existen varios husos horarios. 12.000 observadores nacionales y 600 extranjeros, de la Unión Europea, Naciones Unidas y ONG, han sido desplegados en el país, que comparte 3.200 kilómetros de frontera con el gigante estadounidense, adonde han emigrado 20 millones de mexicanos. De ellos, cuatro lo han hecho en el último año, según Obrador. México tiene una población de 106 millones de habitantes. Según datos oficiales, 50 millones son pobres.

Emigrantes

La macroeconomía, apoyada por el crecimiento en Estados Unidos, los altos precios del petróleo -una de las principales fuertes de recursos-, y el plan de promoción de viviendas lanzado por Fox, que concluirá su mandato el 1 de diciembre, han contribuido a que el crecimiento fuera del 5,5 % en este primer trimestre. Además, no se pueden olvidar las remesas enviadas por los residentes en el exterior, que suman 4.160 millones de euros. Precisamente, este año los mexicanos residentes en el extranjero podrán votar por correo. Unos 40.000 se registraron, y más del 60% había ejercido ya su derecho.

En el resultado de esta consulta, para la que el IFE destinó 960 millones de euros en asignaciones a los partidos, influirá también el electorado joven. Por eso, los cinco candidatos acudieron al canal de música MTV. El 44% del padrón, -31,6 millones-, son jóvenes entre 18 y 34 años. De ellos, 12 millones votarán por primera vez. Sin embargo, una encuesta del Instituto Mexicano de la Juventud (IMJ) determinó que el 22 % de éstos se muestra desinteresado por la «deshonestidad» de los políticos. Obrador, no obstante, confía en que su cercanía a la gente le haga ganar. Ha prometido un manejo técnico de la economía y subir los salarios de los más pobres hasta en un 20%. Calderón le criticó porque «aumentar el ingreso de los mexicanos no es sacar un conejo de la chistera».

Hugo Chávez

Una de las cosas que lo tienen más cansado es que lo comparen con el presidente venezolano Hugo Chávez. De todas formas, el IFE ha ordenado retirar toda la publicidad en la que le relacionaban con el venezolano y también «invitó» al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) a retirar anuncios en los que alertaban sobre los «peligros de cambiar el rumbo». Obrador les llamó «delincuentes de cuello blanco». Y Calderón aprovechó para posicionarse: «No me interesa defenderlos, pero sí que se invierta y se genere trabajo bien pagado para todos». Para la campaña, AMLO no ha utilizado el avión. Su comitiva se componía de cuatro camionetas. Su principal oponente, Calderón, prefería viajar en avión. Por aire o tierra, los problemas son los mismos: narcotráfico, corrupción, inseguridad, conflictos, pobreza y desigualdad. Serán los retos para el presidente.