La policía registró ayer la sede central en Málaga de la empresa inmobiliaria Aifos, que se ha visto involucrada en la operación Malaya II tras la detención de su director comercial, Francisco García Lebrón, que declarará hoy ante el juez Miguel Ángel Torres. Los investigadores copiaron el sistema informático de la compañía y mostraron especial interés por toda la documentación relacionada con los hoteles Guadalpín de Marbella, según informó un portavoz de la empresa. La intervención comenzó en torno a las 11.00 horas cuando una veintena de policías nacionales, entre agentes uniformados y de paisano, acompañados por otros tantos de la Agencia Tributaria, se personaron con una orden de registro en las dependencias, en la malagueña calle Císter. Los especialistas de la Sección de Blanqueo de Capitales de la Udyco-Costa del Sol y de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) se dedicaron a copiar el servidor de la compañía, al que están conectadas tanto delegaciones como casetas de venta que suman en total entre 30 y 40 puntos de red. Durante el registro, los agentes confiscaron documentos en formato papel y unos 200.000 euros en efectivo que estaban en la sede de Aifos. Fuentes de la empresa aseguraron que ese dinero estaba destinado al pago a proveedores.

En ese momento se encontraban en las oficinas unos 170 empleados, que salieron del edificio para facilitar la labor de los agentes. También estaba allí el presidente de la empresa, Jesús Ruiz Casado, que abandonó la oficina a las dos de la tarde. El responsable de Aifos mostró la disposición de la empresa a colaborar con los agentes «en lo que necesiten». Ruiz explicó que el equipo de informáticos de la compañía ayudó a los agentes «capturando datos para que puedan hacer su investigación lo más rápida y cómodamente posible para todos».

El registro se prolongó todo el día. Por la tarde, aún permanecían en el edificio los abogados de la empresa y técnicos informáticos de ésta y de la policía, que trabajaban en el copiado de los discos duros.