Desde bien temprano de ayer y acompañados por el tronar de los cohetes fueron llegando los simpecados de las 103 hermandades filiales a la plaza de Doñana para presidir en el altar del Santuario de Almonte, la solemne eucaristía de Pentecostés, que fue presidida por el Obispo de Huelva Monseñor Ignacio Moguer Carmona, y que puntualmente comenzó a las diez de la mañana.

Este año, el acompañamiento musical correspondió al grupo Brumas, que interpretó una misa rociera compuesta especialmente para este acontecimiento. Hubo muchos romeros en la misa y sobre todo en la aldea almonteña, que desde el pasado sábado se ha convertido en la tercera capital de España en relación al número de habitantes.

Las casas de la aldea vivieron en la jornada de ayer ambientes festeros de convivencia, pero sin olvidar el espíritu de romero, llamando la atención que en muchas casas de familias, de peñas y amigos se celebraron misas, rosarios y se cantaron plegarias en honor a la Virgen.

Por estas cosas, el Rocío no decae, por el contrario crece el número de romeros y el número de hermandades filiales, y esto ocurre por la devoción a la Madre de Dios, Pastora y Reina de la marisma onubense.

La casa de la Hermandad de Jerez, una hora antes de la señalada para su particular misa, era un auténtico hervidero, no sólo por los que allí pernoctan, sino por el resto de jerezanos que iban llegando para acompañar al Simpecado hasta el Santuario.

Partió a la una de la tarde desde su casa. El Simpecado fue portado por el secretario de la Hermandad de Jerez y acompañado por el banderín de camino, banderas y guión de la hermandad. Presidía el Hermano Mayor, Paco Gómez, y con él los miembros de la Junta de Gobierno de la Real Hermandad de Jerez.

Hermosa comitiva que se inició en la calle Almonte y pasando por la calle Carretas (antigua Moguer) llegaba al Santuario, donde el padre Alexis esperaba en el altar mayor delante de la Señora de las Marismas, radiante y esplendorosa, para iniciar la eucaristía.

Al padre Alexis le ayudó Paco Barra, rociero distinguido. En la homilía el director espiritual de la hermandad pidió silencio varias veces «para que se escuche la confesión de un cura», que no siendo ferviente partidario del Rocío se confiensa «peregrino» y habla con la Virgen para decirle que «desde ahora y después de siete años en Jerez empieza a sentirse rociero y que todas las dificultades y penalidades sufridas en el camino no son nada comparado con tantas calamidades que padecen tantos y tantos humanos en esta vida».

Por eso él se siente «aliviado y se siente rociero de pleno derecho, por haber padecido el camino».

Finalizada la eucaristía, el coro de la hermandad de Jerez interpretó la Salve Rociera (por cierto, se rumorea que para el año que viene como la hermandad celebra el 75 aniversario pueden que sean ellos los que canten la Misa de Romeros para todas las hermandades matriz y todas la filiales).

Amigos del coro, preparaos que hay tiempo y que siempre se recuerde como la mejor Misa de Romeros en muchos años, que Jerez sabe hacer muy bien sus cosas.

Concluido el canto de la Salve Rociera, la hermandad volvió para su casa, mientras que el Simpecado salió de la ermita sin darle la espalda a la Virgen.

Muchos jerezanos participaron de la ecucaristía y la hermandad volvió por el mismo camino hasta depositar el Simpecado en su casa.

Sobre las dos de la tarde comenzaron las convivencias propias del día, donde los jerezanos visitan desde la casa de hermandad hasta las particulares, de familias, amigos y peñas rocieras, como santo y seña de la presencia de Jerez en el Rocío: casa de Los Amigos de la Palmera, la casa de la peña de Malandar, casa de la peña La Carbonera, la peña el Cacelín, la de Manolo Daza, la casa Bocarando, la de Antonio Narbona, la de Curro Orihuela, con su invento del agua pulverizada (microclima) que sienta así de bien cuando hace tanto calor. En Bellavista 20, enfrente de la casa de Mariano, el tesorero de la hermandad. Curioso, pero casi todo Jerez está ubicado entre las calles Almonte, Bellavista y Muñoz y Pavón. Muy contentos todos por cómo se está desarrollando el Rocío y por la felicidad de estar al lado de la Blanca Paloma.

La Real Hermandad de Jerez se quedó esperando bien entrada la tarde para el Rezo del Rosario, acto que celebran todas las hermandades a las 12 de la noche, momento en el ue todos esperaron el definitivo salto a la reja y aguardar hasta su llegada hoy a las puertas de la Casa de Hermandad. El Rocío es Ella y hoy estará con todos los jerezanos en su casa.