Los infartos, derrames cerebrales y otras patologías no traumáticas provocan el 28% de los accidentes laborales mortales, según el primer estudio sobre la evolución de los siniestros en el trabajo, presentado ayer por el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez. El documento recoge que, desde abril de 2005 a marzo de 2006 se registraron 985 accidentes mortales, 13 más que el año anterior.

Gómez expuso que la evolución de los siniestros hay que vincularla al crecimiento de la ocupación para conocer la situación real. Por ejemplo, aunque durante el periodo analizado hubo un 1,9% más de sucesos, la población afiliada subió un 4,9% y la incidencia de los accidentes bajó un 2,8%. Los siniestros tuvieron su punto álgido en España en el periodo 1999-2000. A partir de esa fecha comenzaron a descender, reducción que desde 2004 se ha frenado. Para el responsable de Empleo «a medida que baja la siniestralidad, la capacidad de disminución también baja».

El total de accidentes entre abril de 2005 y marzo de 2006 fue de 934.048 sobre 15.010.323 afiliados, lo que deja un índice de incidencia de 6.226 accidentes por cada 100.000 trabajadores. Junto a los 985 siniestros mortales, hubo 923.544 de carácter leve; y 9.519, graves. Por sectores, el de servicios dejó más víctimas (397.154), pero resultó más peligroso trabajar en la construcción (235.480) y en la industria (247.349), que tuvieron unas tasas de siniestralidad sobre población ocupada del 14,3 y 10,3%. El índice en servicios se quedó en el 4,3%.

El informe desvela que un tercio de los accidentes ocurridos en 2004 obedeció a sobresfuerzos físicos o a traumas psíquicos como el estrés, la inseguridad que producen los contratos temporales, el cansancio del trabajo a destajo, etc. Así, Rubio aseguró que los riesgos psíquicos son un factor «emergente», y que sólo puede afrontarse «accediendo a las causas que lo provocan».

Por último, Valeriano Gómez apuntó que España está desde hace años a la cabeza de los siniestros, lo que obedece, en gran parte, a que se califica como accidente varias enfermedades profesionales.