La Plataforma Pro Rehabilitación de Santiago ha dado la voz de alarma. El arreglo y reapertura de la iglesia costará 18 millones de euros, unos 3.000 millones de las antiguas pesetas, y puede que hasta más de diez años de trabajos. Así se desprende de los primeros informes que está elaborando el gabinete técnico al que la Junta de Andalucía le ha encomendado el proyecto. En el mejor de los casos, la iglesia estaría siete años cerrada. Mucho tiempo para un monumento tan emblemático para la ciudad y para el barrio al que da nombre. Las hermandades que tienen su sede canónica en Santiago, Prendimiento y Buena Muerte, se muestran dispuestas a meter el hombro para acortar los plazos, pero el problema será como siempre el económico. Aunque la Junta de Andalucía ponga la mitad del presupuesto, ¿de dónde salen los nueve millones de euros restantes? ¿Del Ayuntamiento? Parece poco probable. Lo de Santiago es preocupante.