Al menos una treintena de personas han muerto en las últimas 24 horas en Irak, en una jornada de violencia que coincide con un nuevo retraso en el calendario político, al aplazar el Parlamento el nombramiento de dos ministros clave. El ataque más letal tuvo lugar en la ciudad de Korra, en la provincia de Diala, en el noreste del país, donde un grupo de hombres armados tiroteó y mató a diecinueve personas que se encontraban en una estación de autobuses.

Según fuentes policiales, entre las víctimas, todas civiles, se encontraban al menos siete estudiantes universitarios y otros tantos conductores de autobús. Por otra parte, un responsable árabe suní acusó hoy a las fuerzas del ejército y de la policía iraquí de asesinar a 16 personas de su comunidad residentes en la ciudad petrolera de Basora, a 550 kilómetros al sur de la capital.

"La mezquita Al Arab fue cercada. Unidades del ejército y de la policía la atacaron con proyectiles de mortero y mataron a los 16 trabajadores que había dentro", denunció Jalaf Jalaf, miembro de la comisión instituida la semana pasada por el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, para tratar de detener la violencia en Basora, la segunda ciudad más poblada de Irak.

Fuentes de seguridad, por su parte, aseguraron que los fallecidos en el ataque, ocurrido anoche tras la oración nocturna, eran guardias de seguridad del templo y fieles que se encontraban en su interior en el momento del enfrentamiento. La ciudad de Basora, principal centro del sur iraquí dedicado a la exportación de crudo, ha sido escenario en las últimas semanas de una ola de violencia de la que minoritaria comunidad suní acusa a la mayoría chií.

En la ciudad de Hatania, a 70 kilómetros al oeste de Bagdad, al menos un civil murió y otro resultó gravemente herido por los disparos de un grupo de hombres armados. Según fuentes policiales, los pistoleros dispararon desde el interior de un vehículo contra los dos civiles, cuya identidad no ha sido facilitada, mientras paseaban cerca de su casa,

En Bagdad, las fuerzas de seguridad iraquíes descubrieron en dos zonas diferentes los cadáveres de diecisiete personas con signos de haber sido torturadas. Según la policía iraquí, siete de los cuerpos fueron hallados en el barrio de Saba Qusor, en el centro de Bagdad, mientras que los otros diez se encontraban en bolsas de plástico cerca de la escuela Balat Al Shuhada School, en Al Dour, un barrio donde conviven árabes suníes y chiíes.

En la localidad de Latifiya, a 30 kilómetros al sur de Bagdad, un grupo de hombres armados irrumpió en una escuela elemental y secuestró a tres personas que trabajaban en su interior, informaron fuentes policiales. Según las fuentes, los hombres armados capturaron a la directora del centro, a un profesor y a uno de los guardias que vigilaba el colegio "Al Ameriya".

La sesión del Parlamento, pospuesta de forma indefinida

Por otra parte, la reunión que el Parlamento iraquí debía celebrar hoy para confirmar en su cargo a los ministros de Defensa e Interior, vacantes desde la formación del ejecutivo, fue pospuesta de forma indefinida, informaron miembros de la cámara.

Según Haider al Abadi, diputado de la cámara, la sesión de aprobación de los ministros "fue aplazada, al menos en cuarenta y ocho horas" debido a las discrepancias entre los diferentes grupos parlamentarios sobre los nombres propuestos por el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, para las carteras vacantes.

Jaled al Atiya, viceprimer portavoz de la Cámara, confirmó el retraso y aseguró que la decisión fue adoptada para "dar más tiempo al primer ministro para realizar consultas con los diferentes grupos parlamentarios".