Las prisas, como en cualquier gran estreno, lo llenaban todo en el día de ayer. Decenas de personas corrían de un lado a otro por el patio del Ba-luarte buscando un alfiler con el que dar el último retoque al vestido expuesto en el maniquí o un trozo más de papel maché con el que decorar la estantería donde están los complementos.

Camisetas, faldas, vestidos, pendientes, broches y bañadores iban tomando su lugar en las perchas y expositores listos para ser presentados ante el gran público. Ante los exigentes ojos de la gente, una veintena de diseñadores, venidos de distintos puntos de la provincia, así como de Barcelona, Granada o Madrid, esperaban que el reloj marcara las doce para que por fin se diese por inaugurada oficialmente Mivestidoazul, la I Muestra de Jóvenes Diseñadores de Moda, o lo que es lo mismo, la primera incursión de Cádiz dentro del fastuoso mundo del diseño que ayer abrió sus puertas para mantenerlas de par en par hasta mañana domingo.

Aunque la celeridad y los escasos recursos han sido dos de las principales trabas de esta iniciativa, para las organizadoras -Ana Sánchez y Susana Galindo, de la firma Solitas- todo está quedando «tal y como queríamos, ya que las participantes están poniendo mu-cho amor». Un cariño que las veinte firmas demostraban en la manera de colocar sus diseños y el modo en que habían decorado cada una de las casamatas, donde no faltaron coloridos adornos que hacían de cada stand un pequeño mundo acorde a la estética de cada cual.

Variedad, exclusividad y novedad son los pilares de las propuestas ofrecidas por Maykajim, Lindos Ramos, Othilia, Casa Tomasa, Scholopendra, Debaga, Arsénico, Musa Baniba, Eloísa, Nuria e Irene, Narcipsique, Eskamas, Litro, Rocío Giménez, Nunu, Carmela Silva, María Vernal, Adela Leonsegui, Pulgott y Solitas que ayer presentaban sus colecciones ante la atenta mirada de visitantes y autoridades -lideradas por la alcaldesa, Teófila Martínez- que ayer visitaron entusiasmadas cada una de las históricas estancias.

Además de albergar decenas de diseños, las casamatas del Baluarte acogían ayer una historia que contar. Profesionales del mundo de la moda coinciden con aficionados y estudiantes, aunque todos con el mismo nerviosismo por exhibir sus trabajos ante el público. Las opiniones y trayectorias de media docena de ellos sirven para conocer el perfil medio de todos:

NARCIPSIQUE

Un futuro en el oficio

Esther, Curro y Ana -de Cádiz, San Fernando y El Puerto, respectivamente- exhiben sus trabajos por primera vez ante el público. Estudiantes de la Escuela de Diseño de Moda, estos tres futuros diseñadores se han unido en la firma Narcipsique para dar a conocer al mundo los frutos de su gran pa-sión, la moda, que esperan que pronto se convierta en su oficio.

La «fusión» de tendencias y gustos personales de cada uno -así como los diseños exclusivos y a medida- caracterizan los diseños de estos tres jóvenes que han visto en esta I Muestra de Diseñadores la vía perfecta por la que «entrar en contacto con otros creadores y con el público».

Noveles en esto de exponer sus diseños, Narcipsique reivindica este modo de exhibir sus prendas frente a los tradicionales desfiles sobre la pasarela «ya que, mientras que allí estas siempre en el backstage y no puedes ver las reacciones del público, aquí es todo mucho más cercano», explica Esther, al tiempo que los espectadores aprecian mejor los detalles de los diseños «y hasta pueden tocarlos y probárselos», añade Ana.

Sabedores de que «Cádiz no es Barcelona», en cuanto a inquietud sobre moda se refiere, estos tres jóvenes esperan que esta primera experiencia «se repita por muchos años y sirva para potenciar la ciudad como punto de referencia en el mundo de la moda». «Que si ahora los diseñadores tienen que irse a Barcelona o Madrid, dentro de poco piensen en venirse a Cádiz», argumenta Curro.

NUNU

Aprovechar lo aprendido

El diseño de moda nunca fue una prioridad en las aspiraciones de Nuria Díaz, pero su destreza a la hora de dibujar la ha animado a participar en esta iniciativa con la firma Nunu -en la que también participan Elena Arana y Ana Ortiz-. Esta ilustradora granadina ha sabido combinar a la perfección su oficio con este nuevo hobby, transformando camisetas corrientes en verdaderas obras de arte al plasmar sus dibujos en ellas mediante serigrafías o bordados.

Junto a la posibilidad de promoción de su obra -también participa con una de sus animaciones en la exhibición de trabajos audiovisuales-, esta joven ha venido hasta Cádiz motivada sobre todo por «esta propuesta tan atractiva, tan poco usual en una ciudad del sur, que ha sabido convertir este espacio amplio y precioso en un espacio cultural donde la gente puede interactuar».

ESCUELA VERNAL

La unión entre profesora y alumnas

Sin duda, uno de los stands más atractivos, no sólo por lo exquisito de su viva decoración, sino también por las historias que esconde dentro es el de Carmela Silva, Adela Leonsegui y María Vernal. Estas tres gaditanas -alumnas y profesora, respectivamente, de la escuela Vernal- han aunado en sus diseños la experiencia, la imaginación y la energía que se desprende de cada una de ellas.

Tomándose esto del diseño como «un hobby del que no nos importaría vivir», como asegura Adela, estas tres creadoras consideran «fundamental que si hay una escuela en Cádiz, haya salidas y actividades como éstas» para promocionar a sus alumnos. Así, aunando la experiencia como profesional en este campo de María -en cuyo taller cose a medida-, lo que aprendió Carmela sobre estilismo en la Escuela de Arte y Oficios -experta en la transformación y reciclaje de ropa- y la imaginación en la creación de complementos de Adela, han creado una colección, que ya se puede adquirir, además de en esta muestra, en tiendas de la ciudad como Tokio o Filigrana.

Profesionales, aficionadas o creadoras excepcionales, lo cierto es que la veintena de participantes de esta I Muestra de Diseñadores de Moda no se han dejado llevar por los dictámenes de la moda impuestos por las grandes firmas y las colecciones pensadas para la inmensa mayoría.

El colorido, la creatividad en el estampado y la novedad en las formas son características que sólo pueden estar presentes en modelos pensados y realizados desde la exclusividad, la dedicación y la complicidad entre autor y comprador de las creaciones.